Qin Chu se calló por aproximadamente tres segundos.
—Esta vez no hagas nada, sólo vigílala. Si encuentras que ella aún está tratando de molestar a Huo Mian, entonces ahí sí puedes arruinarla.
—Sí, Presidente Qin.
Qin Chu se sintió aliviado al escuchar que cortaban la llamada
En estos días que habían pasado, él había estado buscando a la persona que había amenazado a Huo Mian al publicar ese hilo.
"Los Diez Pecados De Huo Mian", combinados con las palabras de su madre, resultaron ser muy crueles para Huo Mian.
La charla difamatoria fue terrible, pero afortunadamente Huo Mian mantuvo la mente verdaderamente abierta con todo esto, o de lo contrario ella podría haberse deprimido por todos los chismes.
Qin Chu no sabía quién era He Man, y tampoco podía recordar cuál era el problema que ella tenía con Huo Mian.