—Brittany estaba muy emocionada por esta oportunidad, señora Ashford. No tiene idea de cuánto significa para ella.
La señora Finch, la dueña del orfanato, juntó sus manos en pura emoción mientras decía esas palabras.
Amelie ya estaba al tanto de eso. Cuando llegó a visitar el orfanato, lo primero que hizo fue conocer a Brittany y hablarle sobre su futuro en la escuela de ballet. Sí, la niña estaba emocionada, pero aún era un cambio bastante grande que Amelie no quería simplemente pasar por alto porque estaba a punto de irse.
—Espero que no deje de apoyarla, señora Finch. Es un cambio considerable en la vida de una joven y parece ser una niña bastante sensible. La transición será dura, especialmente porque no habla el idioma, así que espero que al menos se mantenga en contacto con ella hasta que se haya adaptado bien.