Xander miró al hombre que tenía delante.
Parecía un poco aturdido, y sus grandes ojos oscuros estaban llenos de confusión y perplejidad.
Cuando el hombre se puso en cuclillas para hablar con él, le miró directamente. Cada vez que papá Trueman hablaba con él, siempre le miraba desde arriba, haciéndole sentir que le daba órdenes, pero el tirano no era así. Su comportamiento le hizo sentirse respetado.
Xander tragó saliva. Volvió a mirar a Pete y, de repente, dijo: —He venido a hablarte de mi cumpleaños.
Cuando Justin escuchó esto, sus ojos se entrecerraron y preguntó: —¿Cuándo es?
Xander estaba a punto de responder cuando su teléfono móvil sonó de repente, interrumpiéndolo.
Xander sacó su móvil, en el que vio la palabra «Papá» en la pantalla: era Trueman. Se sorprendió un poco. Cuando contestó al teléfono, Trueman dijo: —¿He oído que alguien te intimidó en casa de los Hunt?