Para poder ser estudiante de posgrado bajo la dirección de Anti -y la primera que había aceptado-, Lady Luck debía estar prácticamente radiante.
Las miradas de todos estaban fijas en el profesor que anunciaba los resultados, esperando que anunciara quién era el afortunado.
Por alguna razón, Angela no pudo evitar tragar saliva. Giró la cabeza para ver que Lisa también miraba nerviosa al profesor. De inmediato, se burló: —¿Por qué lo miras? De todos modos, ¡nunca serás tú!
Anti siempre había ignorado algunos de los correos electrónicos que le enviaban dentro del país. Además, sólo aceptaba dos operaciones al mes. ¿De cuántos contactos debió servirse la candidata aceptada para que finalmente la encontraran?
En medio de los pensamientos de Angela, el profesor anunció: —¡La alumna es Lisa Black!
Un furor recorrió a todos los candidatos en el pasillo, y todos miraron a Lisa.