章 33: Manada de bestias
A la mañana siguiente, el grupo estaba de nuevo en el carruaje y descansaban tranquilamente en silencio.
El terreno en el continente de la muerte era raro, tenía muchas zonas diferentes por algunas de las cuales era difícil moverse, por eso el carruaje solo podía llegar hasta ciertos lugares.
Uno de esos lugares con terreno complicado era uno al cual se dirigía el grupo, la misión que había elegido Shin decía que según un aviso anónimo se vio había visto un aumento de bestias salvajes merodeando por la zona.
Se indicaba la necesidad de explorar y limpiar la zona lo más rápido posible, el pago no era demasiado alto ya que lo había puesto una persona anónima pero si había muchas bestias por lo menos podrían sacar dinero de ellas.
"¿Cuánto queda?" pregunto Shin sintiéndose algo aburrido.
Haler abrió sus ojos y miro al frente hacia donde se dirigía el carruaje.
"Hmmm, diría que un par de horas. Es la primera vez que vengo por esta zona"
Haler se giró hacia Gerner y le hizo la misma pregunta que le había hecho Shin a él.
"Gerner, ¿cuánto tiempo dirías que falta?
Gerner también miro hacia el frente y luego de un par de segundos le respondió a Haler con un gruñido.
Haler asintió con la cabeza y se dirigió a Shin.
"Según Gerner unas 3 horas si todo sale bien"
'¿Acaso lo entiende?' pensó Shin sin entender como Haler había entendió lo que había querido decir Gerner que al parecer si conocía la zona.
En ese momento los caballos comenzaron a relinchar y el carruaje se detuvo abruptamente.
"¡Quietos!" grito Kizto mientras trataba de controlar a los caballos asustados.
Los caballos estaban cada vez más inquietos amenazando con romper sus ataduras y salir corriendo escapando del lugar.
"Somnum"
Prara movió las manos suavemente y susurro unas palabras provocando que los caballos cayeran al piso dormidos.
'¿Qué fue eso?'
Shin solo pudo ver que Prara había soltado un tipo de polvo brillante antes de que los caballos se durmieran instantáneamente.
"¿Qué está pasando?" pregunto Prara con un claro ceño fruncido.
Haler también tenía una mirada de confusión en su rostro que rápidamente se convirtió en una mirada de alerta.
"¡Todos cállense!" grito al mismo tiempo que susurraba para no hacer tanto ruido.
Shin no dudo de las palabras de Haler y se quedó callado sin preguntar que sucedía.
Todos se quedaron quietos, incluso Ayhana parecía estar alerta y ya no miraba al vacío cómo hacia normalmente.
El grupo actualmente estaba pasando sobre un precipicio de casi 100 metros, no era una altura tan alta pero lo suficiente para morir por caída.
Estaban a unos 20 metros del precipicio, por el cual no pasaban cerca por motivos de seguridad. Si por algún motivo alguna piedra o pedazo de tierra se desprendía justo cuando estaban pasando eso los conduciría a una muerte segura.
Haler se acercó silenciosamente al precipicio con cuidado y se asomó levemente como si no quisiera revelarse.
'¡Caronte!' Shin trato de decirle algo a Caronte que estaba atrás del grupo a un par de decenas de metros pero su habilidad [Telepatía sensorial] no dejaba mandarle sus pensamientos.
Sin embargo Caronte también era una criatura diferente de un animal normal por lo que había sentido lo mismo que había sentido Haler.
Caronte se acercó al precipicio sin volar y Shin uso la habilidad [Vista compartida] para ver lo que estaba pasando a través de los ojos de Caronte.
'¿Qué es eso?'
Abajo del precipicio había cientos o incluso miles de bestias de todo tipo caminando juntos en manada y luchando de vez en cuando entre ellos antes de seguir caminando en armonía.
Todas las bestias parecían estar dirigiéndose hacia algo en la misma dirección hacia donde el grupo estaba yendo.
Pocos segundos después Haler volvió con el grupo y comenzó a explicar la situación.
"Una manada de bestias" susurro con cuidado.
Aunque hubiera muchas bestias de la misma especie y con habilidades parecidas o incluso iguales a veces nacían bestias mutadas.
Esas bestias mutadas nacían con habilidades diferentes a las de su especie, y entre tantos cientos de bestias era posible que hubiera algunas bestias mutadas.
Aunque estas bestias eran más difíciles de matar por sus habilidades únicas también eran fáciles de reconocer.
Desde la vista de Caronte que era mejor que la de una persona normal en etapa normal sin contar a los Varums, Shin pudo reconocer un tipo de bestia parecida a un toro con un pelaje de tono rojizo, sin embargo uno de estos toros tenía el pelaje negro, significando que era una bestia mutada.
Haler hablo en voz baja principalmente por tener cuidado de alguna bestia que tuviera algún tipo de habilidad que afectara su audición, por eso fue muy cuidadoso en hablar en voz baja para esconder su presencia y no alertar a las bestias.
Esta era la diferencia entre la experiencia que tenía un mercenario con una larga trayectoria que contra Shin que apenas había comenzado.
"¿Es por lo que vinimos?" preguntó en voz baja Prara, con una actitud seria.
Haler asintió con la cabeza y se dirigió a todo el grupo.
"Vamos a esperar a que se alejen antes de hacer cualquier cosa"
Todos asintieron y se quedaron en silencio mientras esperaban pacientemente a que la manada se alejara.
Una media hora después, Haler se acercó de nuevo al grupo y hablo en un tono normal y con una actitud más relajada que indicaba que el peligro ya había pasado.
"Se alejaron lo suficiente" dijo con un suspiro.
"¿Qué fue eso?" Shin no pudo evitar preguntar, estuvo observando todo el tiempo desde la vista de Caronte y noto muchas cosas raras en la actitud de las bestias de la manada.
Haler se volvió a Shin y comenzó a explicar.
"Es una manada de bestias…es algo raro de ver ya que usualmente las bestias no se juntan entre ellas, especialmente si son de diferentes especies"
Haler miro en dirección hacia donde se había ido la manada y continuo.
"Pero no es imposible que actúen en conjunto, especialmente si buscan algo importante para ellos"
Shin frunció el ceño pero antes de que alcanzara a preguntar por el objetivo de las bestias Haler hablo.
"No me preguntes que buscan, si estuviéramos en algún otro lugar que no fuera el continente de la muerte podría responderte que buscan las bestias, pero nada es seguro en este lugar"
Mientras Shin y Haler conversaban, Kizto estaba despertando con cuidado a los caballos con la ayuda de Prara y Ayhana miraba en dirección hacia donde se había dirigido la manada de bestias.
"¿Qué se supone que vamos a hacer?" pregunto Prara mientras soltaba algo más de esos polvos extraños hacia los caballos y susurraba unas palabras.
Haler se mantuvo en silencio un par de segundos antes de responder:
"Completar nuestra misión"
Todo el grupo asintió excepto Ayhana que continuaba mirando en esa dirección.
Con los caballos de nuevo recuperados y calmados, el grupo volvió a estar en marcha.
Con una dirección más seguro la cual seguir, no duraron más de un par de días con dar con un bosque lleno de árboles muertos por el cual era imposible para el carruaje atravesar.
"Hasta aquí llegamos" Haler se bajó del carruaje con un salto y se acercó a Kizto.
"Gracias por traernos hasta aquí"
Kizto solo movió la mano como si lo estuviera echando.
"Me están pagando por esto. Ahora váyanse rápido porque no quiero seguir en este lugar"
Haler asintió y se dirigió al grupo.
"Desde ahora caminaremos"
Con esas palabras todos bajaron del carruaje y Kizto se puso en marcha después de una última despedida.
Shin vio al hombre con el carruaje que se iba haciendo más pequeño en la distancia y no pudo evitar preocuparse levemente por el hombre.
"¿Va a estar bien devolviéndose por sí mismo?"
Haler que estaba mirando el bosque con atención respondió sin girarse.
"El hombre no lleva haciendo esto por años si no supiera como cuidarse por su cuenta"
Gerner gruño en afirmación a las palabras de Haler y se puso a su lado mirando también hacia el bosque.
Shin se encogió de hombros y se acercó a los hombres.
Haler espero que todos estuvieran listos y comenzó a caminar hacia el bosque en silencio.
"¿Qué estamos buscando?" pregunto Prara después de unos minutos de haber entrado al bosque.
Haler se detuvo y se apoyó sobre un árbol.
"Lo que sea que atrajo a las bestias hasta este lugar…pero no debería haber nada en este bosque"
Haler miro a Gerner el cual solo gruño en respuesta.
"Aunque nunca he venido a este bosque he escuchado de el"
Haler se giró para mirar al grupo.
"Y se supone que no hay nada en este bosque, por lo que solo nos queda adentrarnos más"
Prara se cruzó de hombros y miro hacia arriba.
"Si no había nada antes, eso solo puede significar tres cosas"
Haler asintió.
"Si, o mi suposición de que las bestias estaban buscando algo en este lugar está equivocado, o hay algo que no se había descubierto…o los demonios tienen algo que ver"
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