Nicole tenía bloqueado a Eric desde hace mucho tiempo y había cortado todo contacto con él. Ella no esperaba ver su nombre en la publicación de Ian.
El comentario de Eric era sencillo: 'Copia barata'
No le afectó mucho el comentario, pero fue bastante insultante. Ian dejó furiosamente una docena de comentarios en respuesta maldiciendo a Eric Ferguson. Sin embargo, no hubo ningún otro comentario de Eric. La guerra había terminado.
Nicole puso los ojos en blanco sin poder evitarlo.
-Ian no tiene nada mejor que hacer, ¿eh?
-Él está realmente interesado en ti. Todo el mundo puede verlo. ¿Por qué no le das una oportunidad? Puedes aprovechar esto para fastidiar a Eric Ferguson.
-No voy a involucrarme románticamente con mis amigos más cercanos y queridos. Si estuviera interesada en él, habría hecho un movimiento con él hace mucho tiempo, así que deja de decir tonterías. -Nicole frunció el ceño pensando en cómo debía resolver esta situación con Ian.
-Entonces olvídalo. Le he echado el ojo a un collar. ¿Quieres venir conmigo para verlo? -siempre había algo de que hablar entre las chicas.
Nicole asintió y sentía que necesitaba un poco de terapia de compras. Las dos salieron del restaurante y se dirigieron a una joyería especializada. Yvette había reservado ese collar hace tiempo y cuando la empleada lo saco, era absolutamente impresionante.
-Este collar es la última obra del famoso diseñador Pire. Ustedes, señoritas, tienen buen ojo. ¿Quieren probárselo? -la chica detrás del mostrador se dio cuenta en un instante que estas dos señoritas que vestían prendas caras no eran clientas normales y les presento los productos más nuevos de la tienda.
Yvette asintió y se lo entrego a Nicole.
-Pruébatelo.
Las dos señoritas eran como hermanas y nos les importaba quien comprara que. Aunque Nicole no compraba a menudo, tenía muchas joyas. Cada fiesta o cumpleaños, los regalos de sus hermanos eran suficientes como para llenar un almacén. Ella conseguía los últimos modelos de joyas del mercado sin tener que pedirlo.
Sin embargo, ir a tiendas y probarse las joyas era sin duda una experiencia más agradable. Nicole tomo el collar para probarlo cuando de repente escucho una voz burlona desde atrás.
- ¿Probárselo? ¿Acaso puede comprarlo? Oye tú, no deberías dejar que cualquiera se pruebe las joyas de tu tienda porque su olor se pegara al collar y no podrás venderlo. -Ingrid y su sequito de chicas estaban de compras y las vieron por casualidad. El olor a barbacoa de la comida de Nicole e Yvette estaba pegado a su ropa, así que Ingrid no pudo evitar hablar de ello. Ella había sufrido una miserable derrota la última vez a manos de Nicole y estaba tan enfadada que no tuvo apetito durante unos días.
La expresión de Yvette se volvió fría:
- ¿Y eso que tiene que ver contigo?
Ingrid se acercó con arrogancia y dijo:
- ¡Quiero ese collar! Que nadie se lo pruebe porque me preocupa que se ensucie. -ella apretó los dientes y miro fijamente a Yvette, luego se burló de Nicole: - ¿Cuánta mesada te dio tu hombre rico? Probablemente no tienes lo suficiente para comprarlo, ¿verdad? Es mejor que lo ahorres.
-Por favor, envuélvamelo. -dijo Nicole a la empleada mientras dejaba el collar en el mostrador.
Ella le lanzo una mirada fría y clara a Ingrid que llevaba una pizca de advertencia. Ingrid se sobresaltó y casi volvió a sentir el miedo de aquel día. Sin embargo, pronto se recompuso. Ingrid pensó que al estar rodeada de gente y los guardias de seguridad de la joyería, Nicole no tendría el valor de hacerle nada allí.
-Dije que me llevare ese collar. -intervino Ingrid. Ella no dejaría que Nicole se saliera con la suya sin importar que.
La empleada de la tienda hablo un poco dudosa:
-Lo siento, pero estas dos señoritas llegaron primero…
- ¿Qué dijiste? ¡Soy una cliente exclusiva y debería recibir mejor trato! ¡Debería tener prioridad en lo que se me antoje! -Ingrid miro a Nicole con suficiencia.
Las reglas de esta tienda eran que los clientes exclusivos tenían derecho a elegir primero. La empleada de la tienda miro a Yvette y a Nicole apenada y estaba a punto de quitarles el collar cuando Nicole puso suavemente la mano sobre la suya. La comisura de sus labios se curvo levemente.
Nicole saco de su bolso una tarjeta especial de oro negro, que era la tarjeta especial super exclusiva y reconocida internamente por todas las tiendas de marcas de lujo internacionales. Solo se entregaba a 10 celebridades en el mundo e incluso cierta familia real no tenía la oportunidad de tenerla. Era extremadamente preciosa y rara.
Con esta tarjeta, uno podía disfrutar del mejor trato en cualquier tienda de marca de lujo del mundo. La empleada de la tienda echo un vistazo a la tarjeta y se quedó sorprendida durante varios segundos.
-Señorita, ahora mismo se lo envuelvo. -Ya no les dio importancia a las palabras de Ingrid y comenzó a envolverlo rápidamente.
Ingrid estaba boquiabierta y la interrogo con desgana:
-Esto es falso, ¿verdad? ¡No dejes que te engañe!
Aunque Ingrid nunca había visto ni tocado esta tarjeta antes, esta tarjeta era una leyenda propia en el círculo de la alta elite. Las fotos de esta tarjeta legendaria que se filtraban ocasionalmente dejaban una profunda impresión en Ingrid.
La tarjeta en la mano de Nicole era la mencionada tarjeta legendaria. El gerente de la tienda se acercó de inmediato para alejar a los demás clientes.
-Tenemos que pedirles que se marchen de inmediato porque ahora tendremos que atender exclusivamente a esta clienta.
Nicole se rio. Yvette no pudo evitar decir:
-Date prisa y échala. ¡Ella es una molestia para mi vista!