—Mis padres constantemente me piden que haga algo con respecto a mi marca de nacimiento. Estaba realmente molesta y por eso le conté sobre mi problema... Estaba llorando mucho, así que quizás él se irritó y dijo que es tu problema, tú deberías lidiar con él. No llores delante de mí todo el tiempo —Qiao Qing parecía abatida.
—Luego, después de un tiempo, llamó de nuevo y se disculpó conmigo. Dijo que mis padres no conocen mi valor y por eso me están torturando. También dijo algunas cosas desagradables sobre mis padres porque estaba enfadado en mi nombre...
—Qiao Qing luego tomó las manos de Qin Yan antes de continuar—. Pero Yan Yan, no importa lo que pase, ellos son mis padres. Aparte de no estar satisfechos conmigo, me han proporcionado todo lo que quiero. A veces, solo porque miro algo durante mucho tiempo, mi padre piensa que lo necesito y antes de que pueda pedirlo, ya está en mis manos.