"Estoy haciendo esto por el bienestar de la manada", afirma Levi después de escribirle un cheque a mi padre por una suma escandalosa de dinero. Es tan ridículo que casi creo que es demasiado para ser verdad. Evidentemente mi padre ha decidido sacar provecho de todo este asunto de evitar el divorcio.
Papá ve el cheque tan pronto como Levi se lo entrega. Sus ojos se abren como platos. Levi ni siquiera ha negociado con él, simplemente ha duplicado la primera cifra irrisoria que le ofreció mi padre. Y lo hizo sin siquiera pararse a pensar en ello.
"Al aceptar el dinero, garantizas que nuestras manadas están en paz y que puedo permanecer casado con Amber todo el tiempo que ella quiera", le dice Levi a mi padre con voz tranquila.
“Bueno... debo admitir que es una oferta difícil de rechazar”, comenta papá, mirando el cheque.
"No. No puedo dejar que hagas esto —entonces digo, interviniendo.
Tomo el cheque de las manos de mi padre y se lo devuelvo a Levi.