"En Stewart Manor, Reino de Ebodia—Taro tenía dudas mientras se dirigía al comedor. Tenía a Krisha a su lado, claro, pero al fin y al cabo, esta era su familia. Y de alguna manera, solo la idea de enfrentarse a ellos le causaba miedo de formas que ni sus innumerables años de servicio a su rey podían hacerle sentir.
Tampoco ayudaba que solo tuviera cinco días para poner todo en orden. Aunque obtuvo permiso de su rey para atar cabos sueltos en su final, aún tenía quehaceres que atender en los que era insustituible.
—¿Estás bien? —Krisha le preguntó justo cuando se acercaban a la puerta de su destino.
—Estoy bien —respondió rápidamente Taro, asegurándose de mantener sus ansiedades reprimidas.
—Taro, puedo notar que algo va mal.