Faltan dos días para el concierto y recién hoy avanzamos bastante con la coreografía. La mañana estuvo llena de errores y logros y fue muy cansador, al haber bailarines nuevos tuvimos que reacomodar toda la coreografía, realmente fue un día estresante.
Gracias a Dios no nos cancelaron el concierto, digamos que no pude quedarme muy callada.
Ensayamos sin parar toda la mañana, hasta la coreógrafa estaba exhausta, lo bueno es que el sonido no tuvo errores ni las pantallas, lo que le trajo alivio a vicedirector.
Almorzamos y los bailarines siguieron ensayando durante toda la tarde, en cuanto a nosotras tuvimos que alistarnos para ir a ver a "la reina"... Simplemente yo mo quería ir, no quería presentarme ante ella ni su primer ministro. Ellos son traidores.
-No voy a ir- le dije al vicedirector-
-¡Basta! ¿Acaso quieres quedar como una irrespetuosa?- dijo el-
-Ellos no tuvieron respeto a mi patria- dije sencilla y llanamente-
-Lo sé, lo sé...Las benditas Malvinas- suspiró el-
-Por favor Camille- dijo Marcia- Soy chilena y nos llevamos bien-
-Es diferente tu no negaste ayudarnos fue tu gobierno y cosa diferente es que ellos lo siguen vivos a diferencia de esta escoria- conteste-
-Ama a tus enemigos dice la Biblia- dijo Luna desde lejos mientras se vestía-
Con refunfuños fui hacia el palacio. Al llegar había un montón de guardias y cleros, también habían turistas.
Nosotras entramos y ella nos estaba esperando en su trono sentada junto a sus hijos y su ministro de estado. Ambos estaban viejos.
El vicedirector dijo que debíamos inclinarnos antes de que partieramos pero ninguna decidió hacerlo, era una falta de respeto a Dios y además nosotras no necesitamos de la Corona, nosotras necesitamos a los fans.
Al llegar nos paramos las cinco frente a ella y solo hicimos una reverencia coreana.
Ella comentó algo con su ministro y el traductor se acercó a nosotras.
-La reina nos dijo que les informaremos por si nadie les comentó, que, al presentar hay que hacer una reverencia a la reina. Es una tradición- dijo el hombre-
-Lo sabemos-dijo Regina- Digale a la reina que ese acto va en contra de nuestros ideales y creencias. Muchas gracias-
El traductor sorprendido fue hacia la reina y le dijo todo lo que Regina había dicho, su cara de sorpresa y confusión.
-Es un placer conocerlas- dijo la anciana- Diganme sus nombre por favor-
Las chicas se presentaron y a lo último Regina dijo su nombre con el mío.
-Yo me llamo Regina y ella se llama Camille- dijo, yo no alzaba la vista para que no vieran mi cara de desprecio. Yo eranconciente que se darían cuenta-.
-¿Porque la señorita no se presenta?-pregunto ella-
-Es tímida solamente- dijo Regina-
-¡Debe estar muy nerviosa de estar ante la Corona! ¡Con confianza querida! ¡Se que te sientes extasiada de estar frente a la reina y la realeza!- dijo una mujer con una Corona sonriendo al lado de ella-
-Camille, no- murmuró Regina y me sostuvo del brazo-
Yo me solté y hable suavemente: - Yo amo al pueblo Inglés, son fans fieles a la hora de venir a nuestro conciertos y escuchar musica- mientras me escuchaban sonreian-Pero ese mismo amor no lo tengo hacia la corona, es más bien un despreció, si estoy aquí es por Dios no por "admiración"-.
-Querida la envidia no es algo que Dios apruebe- contesto la reina-
-En ningún momento dije que tengo envidia- conteste-
-¿Entonces porque desprecias a la corona? No te hemos hecho nada- dije la mujer altaneramente-.
-Ustedes son asesinos- dije sin pelos en la lengua- Mataron a miles de jóvenes para adueñarse de tierras que legalmente no les corresponden. Son usurpadores- todos me miraron helados-.
La gente no sabía que decir, uno de sus informantes le dijo que era Argentina y que me refería a la guerra de Malvinas. De repente, antes de que me contestara o dijera algo de fondo se escucho un grito.
-¡VIVA LA PATRIA!- dijo una voz maculina en español-
-¡VIVA!- conteste. Para las fechas patrias es un dicho en Argentina-.
En ese instante la reina salió del trono y se fue junto con todo sus hijos y séquito.
El vicedirector nos hizo señas de que nos fuéramos y nos dimos vuelta para caminar hacia la salida.
-¡Señorita! ¡Señorita!- exclamaba un hombre de unos cuarenta años aproximadamente-
-Si-conteste y lo vi, iba vestido con una remera de la bandera Argentina-
-¡Muchas gracias!- dijo con lágrimas en sus mejillas- Vine con mi madre para hacerle justicia a mi padre que murió en esa guerra. Usted ha hecho patria- me dijo el hombre orgulloso-
-No es nada-conteste- Es un dolor que las generaciones no lo olvidan-.
-Ella es mi mamá- dijo el señor. Las fotografías se hicieron presentes, todo el mundo estaba escandalizado-
-Un placer señora- dije-
-Gracias por hacerle justicia a mi esposo- dijo ella-Vivi años duros y de dolor al criar a mis hijos sola-
-No sabe como lo siento y la entiendo- dije-
Entonces Regina me tocó el hombro para que fuéramos hacia afuera del palacio. Apenas salimos, el vicedirector me quería matar, simplemente no podía porque me necesitaba viva.
-Aqui no vamos a discutir, vamos al hotel-dijo el viendo todas las cámaras-
No nos hablo en todo el camino pero al llegar allí.
-¡¿QUE TE PASA?! ¡¿PIENSAS QUE TIENE INMUNIDAD EN TODO POR SER FAMOSA?!- grito el-
-¡Era mi oportunidad! ¡No planeaba hablar pero esa mujer altanera me sacó de las casillas -contesté-
-¡Ahora tendremos que esperar para saber si el concierto no se cancela!- dijo-Llegan a cancelar este concierto y estas despedida-.
Las chica no se enojaron mucho conmigo, pero si me retaron. Ahora debemos esperar hasta mañana para saber que harán.