Al día siguiente, Rosa se encontró ocupada planeando la cena que sería organizada por ella y Zayne. Estaba nerviosa porque no solo sería su primera aparición frente a más familiares, sino que tenía que entretener al rey y a la reina.
Dado que nunca había organizado nada en su vida, Rosa estaba preocupada por cómo resultaría. ¿Haría una buena primera impresión o todo el plan de la cena se desmoronaría?
Zayne estaba acostado de lado comiendo frutas cortadas para él y observando a Rosa perderse en decidir qué platos quería usar y de vez en cuando, ella le pedía su opinión. Su opinión era no invitar a sus hermanos a la cena.
Sus hermanos tenían comida en sus hogares, entonces ¿por qué necesitaban venir aquí? Aún así, él respondía para complacer a Rosa. Ella encontró algo que quería hacer, así que él no podía arruinarlo por ella.
Si no fuera por su madre y sus planes, Rosa estaría centrada en él en este momento.