Los sirvientes se movían de un lado a otro en la mansión, colocando y retirando objetos preparándose para la fiesta de esta noche. Será el 40º aniversario de Gabriel y, como siempre, quería celebrarlo con gran estilo.
Tenían que asegurarse de que las cosas salieran bien porque invitados importantes estarán llegando esta noche. Grandes jefes de la Mafia de diferentes partes del mundo y otros que querían hacer tratos con ellos estarían presentes. No era una fiesta para los débiles o para los cobardes porque muchas cabezas rodarían por placer.
Es la especialidad de Gabriel. Siempre lo hace cada año sabiendo que él es el precio que todos quieren, pero que no pueden tocar ni alcanzar. Era un evento donde reunía a los hombres más peligrosos y mataba al más débil del grupo.