Solo en este momento se dio cuenta Shen Feiwan de que todas las celebridades que asistían al evento de Joyería Fulan llevaban puestas joyas Fulan, promocionándolas entre los clientes VIP como si realmente las estuvieran vendiendo.
Shen Feiwan no pudo evitar asentir.
Lin Nuannuan tenía razón, independientemente de qué tipo de persona fuera Fu Shiyan, ¡ciertamente era bueno sacando provecho como empresario!
Justo entonces, una celebridad se acercó a Shen Feiwan y Lin Nuannuan.
Era un joven guapo, probablemente de veintitantos. Había participado recientemente en un programa de televisión como el segundo protagonista masculino y había ganado algo de popularidad.
Shen Feiwan no podía recordar su nombre.
Lin Nuannuan, la siempre curiosa, lo reconoció en seguida, "Cheng Hao".
—¿Hermana, me reconoces? —preguntó Cheng Hao con una sonrisa jubilosa en su rostro.
—Por supuesto, eres tan guapo, y aún más en persona.
—Gracias por el cumplido, hermana.