—¿No nos va a hacer daño a ambos? —preguntó Gabriel después de una breve pausa. Aun cuando Karyk había dicho que era seguro, era peligroso, especialmente para el alma principal, que iba a estar más débil por lo menos un mes después de la separación del alma, ya que este proceso era como si estuviera cortando una parte de sí misma.
Era como si ambos estuvieran perdiendo algo al separarse, ya que eran uno y el mismo. Aunque era bueno para ellos tener vidas separadas, ya que podían hacer más cosas al mismo tiempo, aún así, algo parecía faltar.
Karyk también sabía todo lo que Gabriel le estaba diciendo. Ya estaba sintiendo el dolor de la Separación. Estaba seguro de que, si el proceso tenía éxito, al menos estaría en un estado debilitado durante un mes.
El Banquete del General del Sur se iba a celebrar pronto. No sabía si se iba a cancelar después de lo que había ocurrido, pero si ese no era el caso, entonces se iba a perder el banquete.