—¡Esposo! —Ya han pasado dos días desde que Géminis se unió a la familia y encaja perfectamente. A las chicas les encantaba burlarse de ella por la noche, lo que la volvía loca pero parecía gustarle cuando recibía tanta atención. Pero además de las actividades nocturnas, se había convertido en la favorita de los niños, a quienes les encantaba montar en su cola. También le encantaba jugar con ellos y a menudo mencionaba lo ansiosa que estaba por tener su propio hijo.
Los soldados que vinieron con ellos ahora estaban alojados en sus propios cuarteles. Esto no era porque Blake quisiera mantenerlos alejados de los demás, sino porque la niebla de la muerte que los rodeaba les absorbía la fuerza vital a aquellos que estaban cerca.