Talia estaba feliz de escuchar que Zina ayudaría a organizar este evento de socialización. A Talia le encantaban las fiestas, pero no tenía idea de cómo organizar una. Por suerte, con la ayuda de Zina y Mindy, no debería ser demasiado difícil.
Talia fue a la mesa lateral y tomó un bloc de notas y un bolígrafo, lista para anotar cosas.
—¿Qué tienes hasta ahora? —preguntó Talia a Maya.
—Nada para esta. La idea es la parte más importante, pero agoté todo lo que tenía y temo que tendremos que repetir algo.
Talia se tocó la barbilla mientras pensaba. No quería simplemente repetir lo que Maya ya había hecho. Esta era su fiesta y Talia quería darle su toque personal. Pero, ¿cuál podría ser ese toque?
Talia recordó eventos a los que asistió y uno se destacó como fantástico.
—¿Qué tal una feria? —preguntó Talia.
Maya se detuvo. —¿Una qué?