Así que, cuando escuchó lo que Ezekiel había dicho hace un rato, se sintió fatal. Parecía que no era Ezekiel quien quería mantenerlo en la oscuridad sino el Rey. Y aunque la verdad que había escuchado era demasiado devastadora, todavía tenía dificultades para creerla. Nunca se le había cruzado por la mente que el problema no fuera tan superficial e insignificante como había pensado y que... su hermano, Kai, pronto moriría en el futuro cercano.
Y ahora… parecía que no solo había logrado llegar a la cruda verdad y también ganar la atención de Ezekiel causando problemas... desafortunadamente, también había la necesidad de soportar las consecuencias y pagar un precio por estas cosas. Una consecuencia imprevista e increíble.