La pelea entre Minny y Tobi había terminado y, mientras el chico se levantaba del suelo y veía todas las miradas sobre él, tenía una gran sonrisa en su cara. Al mirar a Minny, sin embargo, sus cejas y su expresión facial contaban una historia completamente diferente.
—¿No hice nada malo, verdad? —pensó Tobi mientras pasaba junto a ella, cojeando y soste-niendo su brazo. No estaba tan herido, pero sintió que fingir una lesión le iría bien en esta si-tuación si no quería que le pegaran de nuevo.
—Sí, estoy seguro de ello. Estoy seguro de que cuando sus padres se enteren de que es una de las estudiantes reclutadas por los líderes, me lo agradecerá. —Tobi continuó sonriendo.
Dirigiéndose de regreso a su asiento, fue entonces cuando escuchó que Jared había pedido un combate, pero no con cualquiera, sino con Minny.
La reacción de la multitud a esto fue interesante ya que no había vítores ni emoción, sino un poco de confusión mientras hablaban entre ellos.