Lo primero que Oscar notó al mirar lo que acababa de atacarlos fue que tenía una forma humanoide. Aunque no parecía completamente humana, su forma era la misma. Había dos piernas, dos brazos y una cabeza.
Sin embargo, también había algunas características distintivas que dejaban claro que no era un ser humano normal en absoluto. Sobresaliendo de su hombro había dos alas negras, y la mitad superior de su cabeza era completamente negra sin cabello. Era difícil incluso ver si la bestia tenía ojos.
Finalmente, donde normalmente estaría su boca, su mandíbula se estiraba ampliamente, mostrando sus largos dientes afilados que llegaban hasta el fondo de sus mejillas. Era la primera vez que veían a una bestia humanoide.