Michael seguía un poco incómodo al final. Pero Wendy vino personalmente a la empresa y le trajo comida.
El corazón de Michael se ablandó un poco.
Wendy se iba mañana y ambos sabían que nadie podría convencer a nadie más.
Al día siguiente, cuando Wendy se despertó, Michael ya no estaba en casa.
Había una nota adhesiva en la mesita de noche.
Wendy miró la hermosa letra en ella, que decía:
—No voy a despedirte por algunos asuntos, que tengas un buen viaje.
Wendy tuvo sentimientos encontrados al leer la simple línea.
Parecía que no había manera de aligerar la relación entre ella y Michael antes de que se fuera.
Leah y Jake definitivamente querrían despedirse de Wendy hoy. Anoche solicitaron permiso y no fueron a clases por la mañana.
Zess llegó al aeropuerto con los dos niños.
Wendy se paró en la puerta de embarque y abrazó a Leah y Jake con cierta renuencia.
Los grandes ojos de Leah estaban llenos de lágrimas y ella sollozó y dijo: