Innumerables preguntas aparecieron ahora en la mente de Scarlett y la confundieron acerca de si esta propuesta era real o falsa.
Xander se rió para sus adentros cuando vio que la chica no decía nada. Habría pensado que la mujer se había convertido en una estatua si no fuera por sus hermosos ojos parpadeándole.
—Scarlett, en momentos como este, deberías haber dicho algo... —Sonrió lo suficiente para que el corazón de Scarlett comenzara a latir más rápido de nuevo.
—¿Decir algo!? —Masculló. No sabía qué decir ni qué hacer. Esta era la primera vez en su vida que alguien le proponía matrimonio. Ni siquiera lo había soñado.
Por un momento, solo pudo mirar a Xander con preguntas en su mente que la ponían aún más nerviosa.
—Cariño, ¿aceptas la propuesta o... ejem... Esto es solo eso, ya sabes, parte de nuestra obra! —Intentó recordárselo al ver su rostro sonrojado.