アプリをダウンロード
93.75% Con fuerza en el corazón / Chapter 15: CUIDÁNDOME...

章 15: CUIDÁNDOME...

A la mañana siguiente, Satoshi ya no estaba; me desperté y él se fue sin despedirse. Supongo que era normal que esté molesto conmigo; le hice daño y aun todos nos hacemos daño, también insulté anoche a Hiroki; y para variar terminando en un lío con Satoshi, esto se me va de las manos; todos los días hay problemas, siempre hay una discusión que atender, llegan las confusiones, el miedo... Y decir "ya no sé qué hacer". En mi cabeza todo me da vueltas, están enredados mis pensamientos, de mal en peor van las cosas, pero de alguna manera, necesito una solución desde la más pequeña a la que más está afectando. Doy un largo suspiro de estrés, me levanto de la cama, me pongo unas zapatillas y salgo de la mansión a despejar mi mente.

Intento respirar el aire puro y ver la tranquilidad de la mañana, era lo único que me traía paz. Comienzo por pensar: "si yo no soy la mujer que en verdad Hiroki ama... creo que me toca aceptarlo a pesar de que niego hacerlo, en verdad ¿a quién le gustaría ver a la persona que te gusta junto a alguien más? Es por eso por lo que Satoshi ya no me soporta, pero él y yo estamos en las mismas, ambos no podemos hacer nada para evitarlo. Ahora lo importante es derrotar a Oyuki: por mi pueblo, por Hiroki, por mis amigos, por mis padres y por mí misma, debo tener fuerza en el corazón. Con fuerza en el corazón" muestro una sonrisa dibujada en mi mente, reflejándola en mi rostro. Me detengo por unos minutos para admirar el paisaje lleno de vida que tenía serenidad contra mí y poder respirar, dejar la atadura que penetra mi cuello y no me dejaba respirar. De repente siento que unos brazos cruzan por mi torso y un rostro se inclina a mi espaldar.

— por favor no digas nada... — dijo una voz temblorosa. Era Hiroki— no te muevas y no digas nada— ordena. De todas maneras, no tenía intenciones de moverme. Trago saliva con dificultad —... Naomi... No vuelvas a pensar que yo no te protejo por mi voluntad... — me abruma con sus palabras desprevenidas como las flechas que dispara (así de impredecible es Hiroki).

—... ¿No es verdad? — le pregunto tan seca — Estoy harta de que me mientan ... Yo... No te gusto... Tú no me amas... Tú amas a Kyoto... No necesito de tu pena... Yo...— él bruscamente voltea mi rostro y pega sus labios contra los míos, tocándose tan de repente que me dio un escalofrío y un calor por todo mi cuerpo, mi corazón late tan rápido... "Me... Besó", él se aparta de mí y me clava su mirada contra la mía. Lo miro sorprendida.

— deja de ser tan tonta — su mirada cada vez se hace más tierna — ... ¿Esto Te hace comprender al menos? Tu inseguridad me vuelve loco ... — se vuelve a pegar contra mí, dándome otro beso, pero más apasionado, yo dejo de resistir— No vuelvas a dormir con otros hombres, no permitiré que nadie más te bese..., ¡tú eres mi prometida!... si no cumples tu promesa te mato — se vuelve a pegar a mis labios tan cálidos... más suaves... más tiernos. Acepto su condición y recibo sus labios cerrando mis ojos tan añorada, me dejo llevar por el momento tanto. Él no le gusta separarse de mí...

En ese momento, fue mejor que el que tuve con Satoshi. Me sentí tan segura con Hiroki, él encendió esa parte de mí. Quería que ese momento fuera parado. Solo mi corazón puede recordar este momento, y era cruel compararlo. Pero hay fue cuando me di cuenta de que ya no estaba confundida, que quiero estar con Hiroki, aunque tengamos dificultades. En sus brazos me quedé y dejé que su cariño se apoderara de mí. Ese recuerdo consume todo mi cuerpo; me causa escalofríos y calor al mismo tiempo, me hace cosquillas bruscas y tiernas. Me asusta y me da confianza, es algo que me revuelve todos mis sentidos.

En la tarde le pido a Soshi que caminemos juntos para hablar y des atrasarnos, él me cuenta todo lo que ha habido en el palacio... a muchos sirvientes los han asesinado por intentar escapar, los castigan con azotes si no siguen instrucciones, algunos guardias a parecen muertos por revelarse. No puedo creer todo lo que esa señora miserable le está haciendo a mi hogar, y no puedo hacer mucho al respecto porque estoy aquí... escondida a que no nos encuentren.

—qué mujer... tan atroz... a ti.... ¿qué te han hecho? — le pregunto preocupada, Soshi remanga su Kimono y me muestra alguna heridas resientes.

—Satoshi... me salvó en cada una de ellas evitando que me hicieran algo más... —me confiesa llevando sus piernas al pecho. Recojo también las piernas sin saber que decirle al respecto, él mató a mi padre... y verlo aun haciendo esa atrocidad... me quema el corazón — tranquila... también pensé que Satoshi quiso matar a tu padre... también estuve muy enojado...

—Sigo sin entender por qué lo hizo... — Soshi se voltea a verme, me mira tiernamente, esa mirada que me cautiva como si fuera mi hermanito — Te quería proteger... — dice mirándome muy seguro de sus palabras, pero sigo sin entender a que se refería con protegerme... de mi padre lo dudo, de esa mujer de seguro... le suspiro queriendo cambiar la conversación, en realidad si sigo hablando de esto volveré a pensar que estoy sola y lo que menos quiero es estar triste por ahora.

—Soshi... creo que me estoy enamorando — le confieso empezando a sonrojarme, él sonríe

—es obvio, como sabes que Satoshi ya no es el malo, ahora puedes casarte con...

—No es Satoshi... —le confieso sin apartar la vista al paisaje...

—... e...espera... no me digas que es de... — él da una breve pausa intentando analizar la situación y pensar porqué dejé de amar a Satoshi — veo... que te gusta Hiroki... verdad — le asiento llevando mi rostro a las rodillas tapándolas por la vergüenza, o no vergüenza... más bien timidez de que ahora lo sé... ese beso de esta mañana... no paro de pensar en esto... no paro de pensar... en que Hiroki y yo ahora queremos estar juntos... pero me siento mal en desechar a Satoshi, porque simplemente ya no puedo revivir lo que siento.

—le fallé... a mis sentimientos ¿verdad? — empiezo a sollozar un poco recordando todo lo que Hiroki ha hecho por mí, como ha sido tan atento y como ahora mi corazón se derrite.

—Quizás... — me responde mirando también el paisaje tranquilo—¿Te gusta o Satoshi o Hiroki? No te comprendo... Se supone que ustedes tienen una historia muy larga, de años y te enamoras de Hiroki muy de repente. No te comprendo... Eres el ser más difícil — le levanto una ceja sarcástica

— Soshi... Es verdad que tuve mucho que ver con Satoshi, pero... Las cosas cambian, aunque Satoshi no haya tenido la culpa, no puedo verlo más con los mismos ojos o sentir algo por él... Mi corazón late cuando esta Hiroki, me siento segura y me da ganas de protegerlo, peleamos todo el tiempo, es frío, sarcástico, grosero, sus planes no concuerdan con los míos, suele ser inseguro... de alguna manera acepto eso de él... Me encariño más y esos defectos me suelen gustar... Me siento segura, me siento confiada... No sé qué me pasa —le explico a Soshi. Doy un suspiro de estrés.

— Estas... Más que enamorada ¿es lo que quieres? ¿Es lo que tu corazón desea? — me mira para estar seguro. Asiento con una sonrisa— entonces... Lucha por él— me da palmaditas en la espalda, amistoso me mira y me consuela.

De repente... un objeto sale volando de los arbustos hacía nosotros, empujo a Soshi para que no nos dé a ninguno de los dos, me hace una pequeña herida en el rostro... "¡¿qué?!" volteo a los arbustos y veo una figura detrás de las hojas intentando escapar. Rápidamente le disparo una flecha a aquella sombra ... Lo hace caer. Corrimos hasta donde el sujeto, pero desapareció.

— ¿qué ha pasado? — Soshi está alterado.

—no lo sé, yo... — alguien me toma por la parte de atrás e intenta ahorcarme con su brazo. Es un hombre, intento zafarme y forcejear para escapar, me tiene bruscamente en el cuello.

— ¡si te acercas la mato! — le amenazó a Soshi quien estaba asustado parado sin saber que hacer. Doy una patada en sus partes blandas aquel hombre, y logro escapar. El sujeto parece ser un espía "¿será del castillo?". Se ve amenazante. Pongo a Soshi detrás de mí (Soshi no sabe pelear). Y voy defendiéndolo. Saca su espada e intenta atacarme, intento esquivarlo, pero me hace una horrible rotura en mi hombro, me clava la espada horriblemente, veo mi brazo y la sangre en su espada. Él hombre me mira frente a frente con una expresión muy aterradora.

—¡Hasta nunca princesa! — me exclama el señor... pero siento en mi mano... que tengo una flecha.

—¡Hasta nunca! — lo enfrento y le encajo la flecha en todo su cuello descubierto, el hombre sangra más que yo matándolo de inmediato. Él saca la espada inconscientemente de mi hombro y este sangra demasiado, me empiezo a marear y caigo en el suelo ya lista... para irme....

— ¡Naomi! — exclamó Soshi asustado. Intento no dormirme o desmayarme

— ¡NAOMI! — Grita Hiroki preocupado acudiendo a mi — ¡Estás sangrando! — me levanta rápidamente. Ya estaba a punto de caer allí mismo.

— Hiroki... — le susurro con muecas de dolor, pero creo que no me escucha.

— ¡no cierres los ojos! ¡no te permitiré que mueras! – exclama muy histérico, intento no hacerlo, pero cada vez es más difícil.

Él me acuesta en la cama de nuestra habitación. En seguida saca la parte superior del kimono para examinar mi herida, él nota de inmediato lo profunda que es.

—¡Maldición! — exclama Hiroki muy estresado sin saber que hacer — debo vendarte y desinfectar esto... tienes que quitarte el kimono... dice apenado — me sorprendo al instante al escuchar esta extraña petición, pero no puedo hacer nada al respecto, debo hacer lo que me pide... —debo vendarte la herida...

—¿la tía no puede ayudarme? — intento formar una oración del dolor tan intenso que tengo — ella no sabe hacer esto — no tengo más remedio de que Hiroki haga su trabajo. Accedo a que me quite la parte de arriba de mi Kimono, intenta sentarme evitando que la herida se abra más sosteniéndola con cuidado para que pare un poco la hemorragia, me quita la parte superior llevando esta hasta las caderas dejándola totalmente descubierta... la verdad me siento muy penosa tener que enseñarle mi pecho desnudo... pero no puedo hacer nada salvo taparlas y que no se note tanto.

Hiroki me venda un poco el hombro mientras calienta el agua para limpiarla y desinfectarla, me quedo acostada muy avergonzada y sintiendo demasiado dolor, un dolor punzante en todo mi brazo que me provocaba arrancármelo y no sufrir más, siento este muy entumido. Hiroki regresa con una cubeta de agua tibia después de un par de minutos, desvenda la herida y con un paño húmedo intenta limpiarla. Me le quedo viendo muy conmovida por lo preocupado que estaba.

—¡Que tonta eres! ¡Eres muy descuidada! — me regaña limpiando mi herida, le sonrío en mis ojos agradeciéndole por su cariño y ser tan atento.

—Gracias... — le suelto ya sintiéndome más tranquila... el dolor disminuye un poco más — eres un pervertido — le digo entre risas sin dejar de mirarlo.

—Tal vez un poco — me responde siguiéndome el juego — aunque... no puedo hacerte nada, aún eres muy pequeña y no estamos casados — dice muy burlón — sabes... jamás he hecho esto... — sus mejillas se sonrojan un poco.

—¡Mientes! ¿entonces como sabes de esto?

—Cuando te secuestran los del palacio de preparan muy bien... ser príncipe no es fácil — me responde de broma en broma, me encanta su sentido del humor, me hace reír mucho y su sarcasmo.

—se puede decir que entonces ¿soy la primera mujer? — el me asiente con una sonrisa, luego de un pestañeo a otro se le borra como mantequilla, en sus ojos se ve la preocupación, deja de limpiar mi herida por un momento, lo observo confundida porqué a parado o si algo le sucede, el regresa a mirarme y clavarme sus profundas pupilas.

— Naomi... —. Me da una mirada tierna y entristecida — no vuelvas a pensar que yo amo a otra chica... — dice, no sé a qué lleva eso al caso — Por favor, por algo tú eres mi prometida y por algo aún no me arrepiento de que lo seas... Sinceramente si no te digo esto ahora, será para mi más difícil decir lo después — me sonríe, con sus dedos algo pintados de sangre y agua, los pasa sobre mis labios, se ve que se quiere acercar, pero con mi pecho desnudo será algo incómodo.

Es la primera vez que es tan sincero consigo mismo. Me gustaría que fuese así todo el tiempo, pero ¿cuándo tendríamos tiempo para pelear? ¿Cuándo sería el momento de aprender de los defectos del otro? Y de luchar para que eso no nos distancie. Creo que no lo cambiaría... No lo haría, preferiría pelear diez mil veces con él y amarlo de esta manera, antes de aburrirme pensando que todo será perfecto cuando no lo es... Y es genial, es bueno pensar que podemos superar las adversidades juntos. Nuestras diferencias nos hacen fuertes


Load failed, please RETRY

週次パワーステータス

Rank -- 推薦 ランキング
Stone -- 推薦 チケット

バッチアンロック

目次

表示オプション

バックグラウンド

フォント

大きさ

章のコメント

レビューを書く 読み取りステータス: C15
投稿に失敗します。もう一度やり直してください
  • テキストの品質
  • アップデートの安定性
  • ストーリー展開
  • キャラクターデザイン
  • 世界の背景

合計スコア 0.0

レビューが正常に投稿されました! レビューをもっと読む
パワーストーンで投票する
Rank NO.-- パワーランキング
Stone -- 推薦チケット
不適切なコンテンツを報告する
error ヒント

不正使用を報告

段落のコメント

ログイン