POV León
Luego de dejar a Paul llorando y lamentándose, sí, estaba llorando mientras balanceaba su espada para tranquilizarse, en vez de llorar debería correr por Lilia. Aunque no me interesa, en cuanto a Rudeus, seguía escondido en su pieza, lo más probable es que esté llorando por el presente y el pasado.
Aunque dudo que eso lo detenga, creo que se levantara de esta caída, o eso espero, si no, sería demasiado aburrido.
Ya han pasado algunas horas, y Lilia logro conseguir una caravana que la llevara, varios aventureros la custodiaban, entre ellos, algunas mujeres muy hermosas, pero ninguna de mi gusto, talvez pase una noche con ellas y me divierta, pero quien sabe, soy demasiado cambiante con mis deseos.
Las horas pasaron, luego los días, y todo normal, muchos intentaron coquetear con lilia, y no puedo culparlos, el camino no era el más óptimo, y la carreta se movía demasiado, ahora imagina como se movían ese par de tetas tamaño familiar. Claro que todos fueron rechazados con dureza, dudo que abra el corazón, menos después de lo que paso.
El paisaje era hermoso, tengo que admitir que amo la naturaleza, los pájaros, los árboles y los bandidos que se esconde más adelante, mi alma druida hormiguea. Aunque los bandidos apestan, ¿no pueden bañarse?, suspiro, por eso son mejores los ladrones de mi mundo, siempre usan corbata y traje.
Además, ellos roban cientos de millones, estos tipos unas cuantas monedas de oro, no podemos compararlos.
Como recuerdo, no voy en la caravana con ellos, ni de broma, no pienso dormir en lugares tan duros, y poco cómodos. Mejor volvamos con los bandidos que se ubican a unos 6 kilómetros, hacia adelante, los aventureros todavía no se dan cuenta.
Pero el que va más adelante como guía, esta a punto de encontrarse con ellos. Lástima por él, los bandidos tiene buenas habilidades de camuflaje. No debería ser la primera vez que roban, claro que no, estos tipos se hacen una vida como bandidos.
No los culpo, yo igual haría lo mismo si estuviera en esta época, claro que me volvería el líder, y me llevaría alas mejores mujeres. Y eso de compartirlas como botín, no lo haría, me sentiría como un cornudo.
Una vez leí sobre algunos jefes bandidos que compartían a sus botines, incluso las mujeres, bueno, cada uno con sus gustos. 8 minutos después, ya estábamos en la boca del lobo, a punto de ser devorados, los aventureros sonrían y charlaban como idiotas, mientras intentan coquetear con las bellas mujeres.
Suspiro, no pueden ser tan idiotas, acaso no se dan cuenta de que su guía no volvió, y no dio su reporte, además, ¿por qué enviaron a un solo guía?, es sentido común enviar dos, uno detrás del otro, bueno, nada que hacer, solo puedo dejar que mueran algunos y salvarlos, si es que no pueden.
Una flecha voló desde el árbol más cercano, y se incrustó en la cabeza de una sexi aventura, joder, que bandido más idiota, se supone que las mujeres se dejan vivas, para vendarlas como esclavas más tarde, además puedes usarlas, pero quien soy yo para juzgar sus métodos.
-"¡Formación, ataque enemigo!" Grito el líder, era un tipo grande y musculosos, bastante bronceado
Pero no todos le hicieron caso, algunos entraron en pánico y arrancaron, aunque no sirvió, ya que fueron asesinados, por los bandidos que habían rodeado la caravana, ya no podían correr, tenían que luchar si querían salir con vida.
Todos estaban quietos, esperando quien da el primer movimiento, o talvez quieren iniciar una negociación, los bandidos son exactamente 35 personas, los aventure son 15, y 30 personas normales, espera, Lilia también era como una especie de guardián, me acuerdo que trabajo en el palacio imperial, pero la despidieron por inepta, y dejar que envenenaran a la princesa.
-"Bastardo" Grito uno de los aventureros, parece que era pareja de la que murió, se le ve muy triste y loco."
Seguro no estaría tan enojado, si supiera que la chica que esta muerta, lo engañaba con el que parece el jefe.
-"Espera Lundo, cálmate y fórmate si no quieres morir."
¡Qué hipócrita!, follabas a su chica y ahora quieres confortarlo, ni yo soy tan desgraciado. Dejando eso de lado, el líder de los bandidos apareció, o creo que es líder. Era un hombre grande y barbón, no cubría su cara y apesta bastante, lo mataría ahora, pero quiero divertirme un poco antes.
-"ver que ser el líder, me llaman Otonon, cuál ser tu nombre aventurero" Pregunto el líder bandido.
-"Raim..., escucha Otonon, deberías retirarte, el dueño de esta caravana y sus bienes, es un comerciante de renombre, si nos atacas, te ganaras la enemistad de un hombre poderoso, no creo que quieras eso, ¿o sí?"
No es por nada, pero todos los presentes son personas normales, o sin valor alguno, si hubiera un comerciante importante, por lo menos contrataría a alguien de renombre, como un rey espada o algo. No por nada son comerciantes, son tipos astutos que valoran su vida y mercancía.
-"¡Oh!, que terrible, si ser verdad, solo quedar irnos."
Otonon temblaba en broma, mientras le daba la espalda a Raim, Raim solo podía rechinar los dientes y apretar con fuerza su espada, estaba claro que se burlaban de él, y Otonon sabía que la caravana solo estaba compuesta por civiles normales.
Por lo que veo, Raim está enojado, pero por dentro, seguro está pensado en como salir de esto con vida, no creo que le preocupen unos cuantos civiles sin importancia.
Tercer punto de vista --------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------
Raim pensó en las posibilidades de ganar, y eran cero, miro a las personas que tenía que proteger, y luego miro a su equipo, sopesando las perdidas y ganancias, era mejor correr y salvar a sus amigos, que sacrificarse por algunos desconocidos.
-"Pareces nerviosos Raim, acaso no mencione que te dejaría ir."
-"Deja de bromas, que quieres, talvez podamos llegar a un acuerdo y dejarnos ir, solo no hagas nada a las personas."
Raim no tuvo de otra, quería hacer un trato e intentar salvar a los civiles, no lo hacía por buena voluntad, Raim no quería perder reputación en el gremio de aventureros, además de que ganarían una multa por no completar correctamente la misión.
-"Trato, un trato ser para persona que tiene algo que ofrecer, y tú, no tener nada."
-"Tenemos algunas monedas de oro, y varios bienes que puedes vender."
-"De que hablar, todo eso es de mi propiedad, acaso no viste el letrero, todo el lugar, ser propiedad de los bandidos bolas rosas."
Cuando León escucho su nombre, no puedo evitar reírse como idiota, que clase de bandido, le pone bolas rosa a su grupo, no podía creerlo, casi pensó en dejarlo ir por contar tan buenos chistes. En cuanto a Raim, ni siquiera hizo una mueca, no era momento para burlarse del enemigo, más cuando este podía matarlo.
-"Comprendo, que tal esto, deja ir a mi gente, no creo que sea necesario una pelea."
-"¡buajajajaja!, no dudaste en abandonar a los que te pagan por protección, que poco honor tienen los aventureros, no creen muchachos."
Todos sus secuaces se reían e insultaban, todos los civiles tenían la cara blanca y temblaban, las mujeres abrazaban a sus hijos, los padres se ponían adelante para protegerlos, y Lilia, Lilia sostenía una pequeña espada, lista para enfrentarse, tenía un niño dentro de ella, y aunque no era deseado, todavía lo cuidaría.
-"¡Tch!, si es lo que quieres, lucharemos hasta el final, y tienes razón, moriremos, ¿pero cuantos hombres te costara?, ¿vale la pena?, además, míranos, no tenemos mucho, si luchamos, serán más perdidas que ganancias."
Otonon entrecerró los ojos, y medito unos segundos, tenía su mano en la espada, lista para el combate, pero no quiera actuar, encontraba que Raim tenía razón, si luchaban, perdería demasiados hombres, y las perdidas serian mayo que las ganancias.
-"Está bien, trato hecho cobarde, puedes irte."
Raim suspiro, y comenzó a retirar a sus hombres, varios de los civiles le gritaban, algunos se arrastraron hasta sus pies y suplicaban piedad, sabían que no tendrían un buen final. Otros perdieron su deseo de vivir y estaban pálidos, en especial las mujeres, tenian claro que su futuro no era bueno.
Claro que algunos eran más astutos, como Lilia, ella tomó su espada, y empezó a retroceder junto a los aventureros, para pasar como parte de su grupo. León se sorprendió, no pensó que la chica fuera tan inteligente, pero sabía que eso no funcionaria, Lilia era hermosa, más que la mayoría de las mujeres, después de todo, es protagonista del mundo, no protagonista principal, pero era parte del elenco.
-"Quieta preciosa, tú te quedas, tienes algún problema Raim"
-"Parece que tenemos un malentendido, ella no es parte de nosotros."
-"¡buajajaja", ¡no solo hermosa!, también ser inteligente, y fuerte." Otonon comenzó a rodear a Lilia, la miraba de arriba a abajo, midiendo sus movimientos, Lilia no apartaba la vista, lista para dar el primer tajo, no se dejaría llevar tan fácil.
-"No tiene honor o códigos los bandidos de hoy, que incluso atacan a mujeres embarazadas." Dijo Lilia.
-"¿Embarazada?, bien, si tu portar bien, y me sirves, ese niño no sufrirá daño."
Lilia no respondió, seguía mirando a su oponente. Ella no pensaba rendirse, ya fue humillada dos veces, aunque en la segunda ella consintió, así que no cuenta. Como decíamos, Lilia no se dejaría humillar, planeaba pelear y dar lo mejor de sí, incluso si moría en el intento, en cuanto a su hijo, ella pensaba que era mejor irse con ella, a sufrir en un mundo tan cruel.
León miraba atento todo lo que pasaba, quería ver que opción tomaba. Aunque ya tenía una idea.
Hmm, no importa que decisión tome, detesto a esta mujer, y no sé por qué, no puedo hacer que me guste, incluso pensé en matarla luego de que tenga a la mocosa, pero quiero juntar al trío "milf" de la familia Greyrat, Lilia Greyrat, Zenith Greyrat, y Hilda Greyrat, además, estas 3 tienen hijo, oyakodon triple, no puedo quejarme.
Espero que me sirvan adecuadamente, después de todo, les salvaré la vida y les daré comida y hogar, claro que si no se comportan, tendré que enseñarle quien manda.
El pensamiento de León era cruel y pervertido, varios pensarían así, pero tampoco está mal, León está pensado en las ganancias que le puede traer la chica, después de todo, él la salvara y les dará comida y un techo, tiene que pagar por lo que se le da, nada es gratis en la vida.
-"Si no piensa decidir, puedes pensarlo más tarde, no puedes escapar de todos modos, ¡buajajaja!"
Los aventureros se fueron, y solo quedaron los civiles, ahora que estaban lo suficientemente lejos, los bandidos bajaron la guardia y se acercaron a recoger el botín y a amarrar a las personas, varios lloraban, los hombres intentaron defenderse. Aunque de nada sirvió, eran civiles y los otros bandidos con larga experiencia, luego de que varios murieron, el resto perdió la moral.
Lilia ya estaba amarrada, todo su valor y coraje, no sirvió de nada, nada pudo hacer contra varios bandidos, quizás antes era un guardián de la realeza, pero eso fue hace mucho, y luego de eso, nunca más levanto un arma, seguro se está lamentado por ser tan descuidada con el tiempo, y olvidar lo cruel que era el mundo con las mujeres débiles.
León se aburrió de esperar, y era hora de hacer su show, pero antes, envió a varios lobos detrás de los aventureros, los iba a matar a todos, porque no eran interesante, y no tenían uso a sus ojos.
-"¡Ey, ey, ey, que hacen!"
Todos se dieron vuelta y levantaron sus armas, los más veteranos apretaban con fuerza su arma, y entraron en postura de batalla, León apareció de la nada, y se acercó a ellos y ni siquiera lo notaron.
-"¿Quién eres? Pregunto otonon.
-¿Quién soy?, es una pregunta muy difícil de responder, al final, que somos todos, somos humanos, bestias, seres vivos, como saberlo, la definición del quien soy, del ser, y del..."
-"¡Basta con tu mierda!, presentarse o ser asesinado"
-"Que poco hablador, y yo que quería iluminarte."
-"Si fueras una chica linda, te dejaría hablar, pero tu no serlo, buajajajaja"
-"Jajajaja, tienes razón, yo haría lo mismo, y como eres un hombre feo...., no tenemos mucho que hablar.
León se quitó la camisa y solo vestía unos pantalones cortos, las mujeres no pudieron evitar exclamar y admirar a tal hombre, era guapo y tenía un cuerpo tonificado. Incluso Lilia no pudo evitar tragar, Paul tenía su encanto, pero el hombre frente a ella, estaba en otra liga.
Claro que no se enamoraron de él, solo pensaba que era muy guapo, León no tenía el aura de protagonista harem, esa que hace que se enamoren solo con su belleza. Pero no se quejaba, para León, enamorar chicas era un arte, que se debe pulir.
-"Buajajaja, si crees que tu cuerpo puede intimidarme, ¡ja!, solo puedo decir que ser idiota, no ves que esto se trata de números, uno vs 35, ¿qué crees que puedes hacer?"
León sonrió, era una sonrisa muy maliciosa que causaba un escalofrío en todos los presentes.
-"Tienes razón, 1 vs 35, creo que es demasiada ventaja para mí, pero bueno, no quiero peder mucho tiempo, así que…, jugamos."
León desapareció, y apareció al lado de un bandido cualquiera, y luego volvió a su posición original, todos quedaron aturdidos, hasta que el bandido exploto en pedazos, todos civiles se pusieron pálidos, algunos no pudieron evitar vomitar, la escena era escalofriante, todo el piso era rojo.
Pero que sucedió, León asesino al bandido con un golpe en el corazón, fue tan rápido que nadie lo noto, luego uso explosión de cadáveres, una habilidad del nigromante, que como dice su nombre, hace que un cadáver explote.
-"Ahora..., sigamos jugando. Su voz era tan fría y aburrida, que paralizo el corazón de todos los bandidos."
León se movió a gran velocidad, y comenzó su lucha, o mejor dicho, masacre, cada persona que tocaba, moría, y luego explotaba, causando un gran daño a las personas que lo rodeaban, incluso algunos civiles salieron lastimados.
A León no le interesaba mucho el daño colateral, incluso él pensaba que deberían agradecerle por salvarlos, y no quejarse por los pequeños detalles.
Solo pasaron 10 segundos, y 34 de los 35 ya estaban muertos, solo quedaba el líder, que hace mucho estaba de trasero en el suelo, temblando de miedo. Será un bandido que ha matado a muchas personas, pero hacerlos explotar y dejar solo manchas de sangre en el suelo, eso era otra historia, incluso un hombre rudo vomitaría por la escena.
León no tenía una solo gota de sangre, salió ileso y limpio.
Con mucha tranquilidad se acercó al último hombre en pie, el líder Otonon, y le puso la mano en el hombro, mientras le daba una sonrisa, normal.
-"Fue bastante aburrido, pero pude estirar un poco los músculos, así que como agradecimientos, te mataré lentamente, que buen tipo soy, no lo crees."
Una niebla verde empezó a entrar en la mano de León, con cada segundo que pasaba el líder Otonon envejecía, sus pómulos se ahuecaban, sus costillas se pegaron a la carne, sus piernas parecían fideos. Ni un solo grito pudo soltar el pobre tipo, y segundos después murió, León dreno toda la vida, dejando solo polvo y algunos huesos.
-"Ufff, eso fue deliciosos, tengo que admitir que robar la vitalidad de otros, es un poco adictivo."
Mientras León miraba sus manos y sonreía, uno de los civiles se acercó, estaba pálido y tembloroso, pero aun así sacó valor para hablar.
-"G-g-gracias p-por salvarnos"
León no pudo evitar mirar al valiente, era asombroso que alguien se acercara a un hombre que asesino a sangre fría, y de manera tan brutal.
-"¿Salvarlos?"
-"Si, gracias por salvarnos de los ba-bandidos."
-"¡jajajajaja!, ¿yo?, ¿salvar?, ajajaja."
El pobre hombre no pudo evitar encogerse, León era demasiado abrumador para él, más cuando reía como un lunático.
-"Bien, dejemos las estupideces, pongan todo su dinero en una bolsa, deberían agradecer, les dejaré el alimento y sus bienes, ya que no me sirve, tómenlo como el pequeño pago por salvar sus vidas."
-"Pe-pero, lo necesitamos para vivir."
León se dio vuelta y miro al idiota que hablo.
-"Veo, y porque no dijiste eso a los bandidos."
-"Porque ellos nos matarían." Dijo una mujer con un niño.
Una respuesta estúpida, ahora, porque estos civiles se volvieron valientes, era debido a que pensaron en León como su salvador, y como personas comunes, no dudaron en aprovechar la situación y exprimir al máximo al pobre héroe.
-"La bella dama tiene razón, no pudimos hacer nada contra esos bandidos, pero usted si, y como es debido, no cree que debería acompañarnos en nuestro recorrido, para llegar a salvo a nuestro hogar, le pagaremos obviamente." Dijo un tipo gordo, que miraba a la bella mujer con lujuria, estaba claro porque la apoyaba.
León se masajeó las sienes, tenía un gran dolor de cabeza, no podía creer que existiera gente tan imbécil, solo porque los ayudo, ellos ya creen que debería seguir ayudándolos.
-"Diré esto una vez más, solo una vez más, pongan el dinero en la bolsa, o los mataré a todos." Dijo León con frialdad.
Lilia actuó rápido, se acercó a León, tomo la bolsa y empezó a correr por las personas y a pedir sus monedas, claro que no todos estaban de acuerdo, pero rápido cambiaron de opinión, cuando vieron a León matar a uno de ellos, como ejemplo de lo que pasaría.
Lilia no era tonta, comprendió que León no era un héroe, era más un mercenario, que no haría nada gratis. León sonrió satisfecho, solo ayudo para ver las reacciones de la chica, y para que supiera que tipo de persona es, León tenía otros planes antes de llevársela, antes llevaría a Lilia por el camino que él quiere, y así asegurar su extrema lealtad.
-"Tú, la pelirroja, busca en los bolsos de los bandidos y saca todo el oro que lleven, no tengo que decirte que pasara si intentas engañarme"
León cerro los ojos, y miro a sus lobos, todos comían como cerdos, locos por la carne humana. Todos los aventureros habían sido capturados, y devorados, ni la armadura quedo.
Minutos después, todo el dinero había sido recolectado, algunos tuvieron que ayudar, ya que Lilia apenas podía la bolsa. León recibió el dinero, y la guardo en su inventario, dio una última mirada a todos, en especial a Lilia y sus pechos, y se fue, no tenía nada más que hacer, el resto se lo dejaría a sus sombras.
Lilia miro como León se iba, no intento detenerlo, tenía claro que si lo hacía, su cabeza volaría y ni siquiera lo sabría, en cuanto a seducirlo.
Pov León. ----------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------
No pienso llevar a Lilia hasta su casa, que flojera, dejaré que mis sombras la cuiden. Cree dos sombras y las envíe hacia ella, y les di instrucciones.
Primero que nada, mis sombras la cuidaran, una vez que lleguen a su casa, me avisaran y haré que la odien por ser una, como decirlo, adultera por acostarse con un hombre casado, luego de eso la expulsaran de su casa, y claro, vendrá su gran salvador.
Pero no la salvaré de inmediato, no vale la pena, me tomaré mi tiempo, y esperaré su peor momento. Dejaré que mis sombras la cuiden, y se aseguren de que tenga la suficiente comida para vivir, y claro, que no tenga más hombres, no me gustan las mujeres demasiado usadas.
Y luego me la llevaré, y le pondré una correa llamada lealtad, solo tengo que esperar, ahora, vamos a volver, pero antes. Cree más sombras.
-"Ustedes, busquen a Hitogmai, pero no este plano, Hitogami se oculta en una especie de grieta dimensional, una vez lo localizan, me avisan, lo mataré personalmente."
Luego cree dos sombras más.
-"Ustedes dos, busquen a Orsted, y mantengan su ubicación, cuando tenga tiempo, iré por él."
Ahora, con todo listo, es hora de volver a casa.
Tercer punto de vista --------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------
León volvió al mundo de avatar, y lo primero que hizo, fue a ver a Azula, que ya era el nuevo señor del fuego y rey fénix.
-"Azula, felicidades."
Azula se acercó a León, y comenzó a olerlo.
-"Es un milagro, no hueles a otras mujeres, ¿debería estar agradecida?"
-"¿Enserio?, y yo que te felicito."
Azula bufo(HmpH), y volvió a sentarse en el trono, cruzo sus piernas y dijo:
-"No vas a inclinarte, ahora soy una Reina"
-"Yo no me inclino ante nadie, además crees que un título puede controlarme"
-"No, no lo creo. Pero deberías mostrar a lo menos un poco de respeto." León levantó los hombros, como señal de no me importa. -"¿acaso no tienes miedo?, ahora tengo el poder de toda una nación en mis manos" Dijo Azula, notando lo poco interesado que estaba León.
León caminó hacia Azula, se inclinó sobre ella, tomo su barbilla y toco sus suaves labios.
-"Así le hablas a tu hombre."
-"Lo serás cuando pongas un anillo en mi dedo, hasta entonces." Azula alejo la mano de León- "No podrás tocarme.
-"Y que esperamos, donde está el traje de boda."
-"¿Crees que es tan fácil?" Azula se levantó, y alejo a León, sus ojos ardían, llenos de pasión, locura, amor, obsesión, era una mirada que podría a un hombre beta de rodillas, pero León seguía firme, con una sonrisa. -"¡No lo es, escucha bien León, nunca podrás tocarme, no hasta que dejes a todas tus mujeres, y sea la única en tus ojos, eso son mis términos, tómalos o déjame en paz!"
El grito enojado de Azula se escuchó por cada rincón del palacio, todos temblando de miedo, rogando que el infierno cayera sobre ellos, aunque algunos seguían normales, como Toph, Ágata y Sara, que estaban preparando la comida.
-"¡Jajajaja!, bien, bien, ahora dire mis términos, serás mi mujer, y punto, deja de joder a las demás, porque nunca las dejaré."
-"Que así sea León, solo ten en cuenta que no me inclinaré ante tus caprichos, no soy tan fácil."
León sonrió amargamente, preguntado que paso con su habilidad harem. Harem era una habilidad que ayudaba a que las mujeres de León, aceptaran con mayor facilidad el harem. Y ahí el problema, ayuda, no obliga, así que al final, no es de mucha ayuda, no si León no pone de su parte.
-"Eso espero, ahora vamos a comer."
León caminó algunos pasos, se detuvo y se dio vuelta, azula estaba con los brazos abiertos, esperando a que León la cargara, no por nada era la chica más mimada de León. León no dudó, la levanto en sus brazos como una princesa y se la llevo. Azula tarareaba y balanceaba las piernas, olvidando lo furiosa que estaba antes, así de bipolar era azula, era bueno que nuestro protagonista fuera paciente.
León no estaba enojado, incluso estaba de buen humor, para él sería divertido derribar a la caprichosa y mimada Azula. Aunque él tenía un poco la culpa, ya que siempre la consintió en todo.
Los días pasaron, y toda la nación del fuego, estaba al tanto de la noticia, el anterior señor del fuego estaba muerto y Azula, su hija era el nuevo gobernante, hubo grandes celebraciones y una coronación, todo fue muy rápido, ya que azula tenía prisa por comenzar con todo, ella quería gobernar el mundo entero.
Azula es cruel, y asesina sin piedad, todos pensarían que quiere traer caos al mundo, pero no es así, Azula quiere gobernar y juntar a todas las naciones en una, ella solo quiere ser reconocida y tener poder y control sobre todo, es su manera de sentirse segura.
Ahora azula estaba en la sala del trono, tenía una mirada apática y aburrida.
-"¡Azula, como te atreves a asesinar nuestro padre!"
Quien gritaba furiosos y enojado, era el príncipe Zuko, cuando se enteró de la noticia, no dudo en volver a la nación del fuego, y ver con sus propios ojos si era real. Cuando descubrió todo, fue directo donde Azula a reclamarle, su tío Irho estaba a su lado. Claro que Irho intento detenerlo, incluso pensó en no volver, temiendo que azula matara al único que puede derrocarla, ya que tiene sangre real, y era el legítimo sucesor al trono.
Irho incluso pensar en entrenar a Zuko, y juntarlo con el avatar, para que pudiera recuperar el trono, Irho no tenía confianza en Azula, él tenía miedo de que su sobrina se volviera loca por el poder, y terminara causando muerte y caos.
-"Zuzu, sería bueno si te calmas, ya no soy una princesa." Dijo azula con calma, mientras comía algunas nueces, no le importaba mucho lo que pensara su hermano.
-"¡Mataste a nuestro padre, y usurpaste el trono!"
-"Mismo padre que te dio esa cicatriz, ¿por qué lo defiendes tanto?, él ni siquiera te amaba, para Ozai eras una deshonra, y una basura, además, no usurpe el trono, lo tome legalmente bajo un Agnis kai."
Zuko rechinaba los dientes, porque era verdad, su padre no lo quería, y él lo sabía, pero no quiera admitirlo y menos que alguien se lo refregara en la cara.
-"Sobrina, creo que Zuko está un poco fuera de sí, debido al largo viaje"
-"¿Sobrina?, bien, lo dejaré pasar, ahora tío, no, general en retiro Irho, usted y Zuko tiene un misión que hacer, y por eso que los llame, ustedes estarán a cargo de tomar Ba Sing Se"
Irho se sorprendió, no pensó que lo llamaran para una misión, menos para esta misión, conquistar Ba Sing Se, la misma fortaleza donde perdió a su hijo, la misma que asedio por 600 días.
-"Es hora recuperar tu honor, tío, y zuzu, si logran capturar Ba Sing Se, también recuperara tu honor y serás bienvenido al palacio, ¿no es lo que siempre quisiste?"
Zuko quería quejarse, pero Irho lo detuvo, no era buena idea enojar a su sobrina, no cuando está rodeada de solados, y puede mandar a matarlos cuando ella quiera.
-"Aunque quiero servir otra vez a mi nación, sigo siendo un pobre viejo, tos, tos...,"
Azula levanto una ceja, como diciendo, acaso te pregunte, Irho lo noto y guardo silencio.
-"No puedes negarte, ahora ve y prepara todo, largo de aquí, tengo otras cosas que hacer."
Irho no tuvo otra, agarro a su sobrino, y se marchó, pensado en la forma de salir vivo de esto.
-"Tío, porque me empujas."
-"Mi querido sobrino, la vida es larga y hermosa, pero para que se cumpla la segunda, primera debes obtener la primera."
-"Deja tus acertijos para después, necesito hablar con Azula."
-"Pronto podrás, por ahora, pensemos en la misión, y en recuperar tu honor." Dijo Irho, dando un cebo a su sobrino, para que dejara de perseguir a Azula.
Zuko guardo silencio, quería recuperar su honor, y ser aceptado, pero aun así, estaba complicado, ahora era Azula a la que tenía que servir, y no le agradaba, era el mayor, y merecía el trono. Al final, apretó los puños y se fue a descansar, estaba muy cansado para tomar una decisión, Obedecer a Azula, o intentar tomar el trono y luchar en un Agnis kai.