La llegada de Zaki e Hinari fue como una pareja de celebridades de poder caminando por la alfombra roja más prestigiosa. Las cámaras empezaron a parpadear como pequeños e interminables relámpagos. Los camarógrafos ni siquiera sabían por qué reaccionaban así, aunque no tenían ni idea de quién era esta pareja. Se suponía que debían esperar al segundo hijo, cuyo nombre o rostro ni siquiera conocían, y sin embargo aquí estaban completamente cautivados por la impresionante apariencia de esta pareja.