—¿Y ahora qué? No me digas que te la vas a llevar al registro civil en la mañana para una boda relámpago —dijo Zaki para molestar y Sei hizo un largo silencio.
Hace cinco años que Sei deseaba poder volver en el tiempo para cambiar lo que había sucedido aquel día. Siempre había imaginado lo perfecto que hubiera sido esperarla en el altar de aquella iglesia, mientras ella iba caminando por el pasillo hacia él. Sin embargo, sabía que no había forma de cambiar el pasado, por eso se había jurado a sí mismo hacer lo correcto esta vez. Quería que ambos experimentaran lo mismo que todas las parejas felices del mundo. Para la segunda vez, quería que todo fuera perfecto y apropiado. Debía ser el tipo de boda que ambos recordarán como perfecta durante el resto de sus vidas.