Hacía más de una década atrás, su madre había fallecido. Esa separación se sentía como si le hubiesen arrancado una de sus costillas.
No quería volver a experimentar ese tipo de sentimiento de nuevo. Por ello, para Yichen, había construido un alto muro a su alrededor, usando cualquier medio posible para mantenerlo seguro dentro de sus paredes.
En cuanto a Yun Shishi, ella era como un pequeño pez, al que, de buena voluntad una vez, él había dejado ir para que llevara una vida sin restricciones.
No obstante, seis años después de haberla vuelto a encontrar, no pudo dejarla ir de nuevo.
No estaba contento con la familia de ella. Originalmente, pensó que se iría con ese dinero. Que se habría ido al extranjero a estudiar, que allí hubiese conocido al hombre adecuado y que se hubiesen prometido sus vidas mutuamente.
Desafortunadamente, la vida no le había ido bien en esos últimos seis años.