A Song Yifan no le sorprendía que Li Sicheng conociera sus planes. Con su influencia, era fácil conseguir esa información. Song Yifan mencionó:
—Me siento algo decaído últimamente, así que unas vacaciones eran casi obligatorias.
—¿En serio...?
Li Sicheng lo miró con una media sonrisa y Song Yifan pudo notar el evidente sarcasmo.
Qué incómodo.
Sheng Ximing se apresuró a comentar:
—Vamos a navegar alrededor de la isla. ¿Quieren venir?
—¿La isla?
—Sí, solo vamos con dos amigos más. Si llevamos más compañía, será más divertido —sugirió Song Yifan.
—Sí, vamos a pescar y hacer barbacoa. Está todo preparado. ¿Vienen?
Sheng Ximing miró al capitán Li y preguntó:
—¿Qué le parece, capitán Li?
El capitán Li miró hacia arriba y contestó pausadamente:
—No quiero retrasar a la gente joven. ¡Diviértanse!