Kevin quería morirse tras escuchar el ruido malicioso que procedía de Cromwell. Quería abofetear a ese tonto y preguntarle si sabía a quién le estaba soltando todas esas blasfemias. Esa persona era la más privilegiada del Gremio de la Magia e incluso Gerian tenía que darle la bienvenida con una sonrisa en la cara. Pero, ahora, le estaban apuntando con el dedo y pidiéndole que se fuera. Kevin sintió que se volvíaloco.
¾Es el fin... es el fin... ¾ El corazón de Kevin latía con fuerza mientras observaba a Lin Li, quien todavía sonreía.
En medio de la protesta de Cromwell, la sala del Gremio pareció haberse quedado en silencio por un instante. Todos dejaron lo que estaban haciendo y dirigieron su atención hacia Cromwell.
Sus expresiones estaban llenas de simpatía y compasión al principio. Luego, pasaron a ser las de idiotas con una discapacidad congénita.
Gerian no se había pronunciado durante los últimos días, pero en sus corazones, ya habían asociado a Lin Li con las treinta botellas de Poción Mágica Arcana.
Era demasiado obvio. Gerian acababa de otorgarle los mejores privilegios del Gremio de la Magia y, en un abrir y cerrar de ojos,aparecieron treinta botellas de Poción Mágica Arcana. Incluso un ciego habría visto la relación.
Si había alguien en el Gremio de la Magia con el que no se podía discrepar ahora, sin duda,era el joven mago con la túnica desgastada que estaba de pie frente a ellos.
Incluso el padre de Cromwell, el viejo Merlín, de quiense decía que estaba a la par que Gerian en términos de logros mágicos, perecería si se metiera con el joven mago.Por lo tanto, no es difícil imaginar cómo acabaría Cromwell.
Alguien que podía sacar treinta botellas de Poción Mágica Arcana de una vez, no tendría reparos en sacar otras treinta. Bajo esta tentación fatal, ¿quién podía imaginarse la cantidad de asesinos que estarían allí fuera, esperando a Cromwell? Sin embargo, seguía clamando sin cesar, sin saber cómo se deletreaba la palabra "muerte".
De entre todos los presentes, Cromwell parecía ser el único que no sabía lo que estaba pasando.
Desde que regresó de las Montañas del Ocaso, Cromwell no se había sentido tan feliz. El resentimiento que había ido acumulando durante mucho tiempo por fin había explotadoy la furia que había sentido en su pecho finalmente había encontrado salida. Cada palabra era cruel hasta la médula y estaba llena de sarcasmo. Criticó la desgastada túnica de mago de Lin Li, su incapacidad para costearse un bastón mágicoy su falta de conciencia de clase al participar en una conversación tan importante como esa.
¡Había sido satisfactorio! ¡Cromwell no se había sentido tan satisfecho desde hacía mucho tiempo!
Pero la satisfacción era intrigante. Era como esa cosa que viene cuando la satisfacción es máxima.
Cromwell era así.
Estaba satisfecho, pero justo cuando su satisfacción alcanzaba su plenitud, vio a Lin Li levantar su mano derecha.
Sin ningún otro gesto ni hechizos complejos.
Solo una intensa ola mágica y un ruido sordo.
Inmediatamente, Cromwell sintió como si le hubieran golpeado en la cara con un martillo. En ese momento, Cromwell sintió que toda su cara estaba destrozada; era una fuerza incomparable que impactaba en su cara como un estallido.
La fuerza era extremadamente poderosa. Cromwell apenas tuvo tiempo de soltar un grito antes de ser derribado. Voló una docena de metros como una cometa con las cuerdas rotas; por fin, aterrizó pesadamente en los escalones de la puerta, con todos los ojos puestos en él.
Cromwell no sentía nada, tan solo frío y humedad. Su cabeza era pesada y se balanceaba como si alguien acabara de estamparle una puerta en la cara. Su nariz también parecía estar rota. Un chorro de calor que brotaba de sus fosas nasales se mezclaba con las manchas de agua de su cara. No sabría si era sangre o agua...
Él vio claramente que lo que lo había golpeado había sido una tromba de agua.
De hecho, iba para todos aquellos que estaban satisfechos al máximo. Pero Cromwell tuvo mala suerte; iba a por él y se estrelló en su cara...
El pasillo se silenció de repente. Las docenas de magos presentes, incluido Kevin, habían estado estudiando magia durante al menos veinte años. Habían observado sin ninguna dificultad que la magia que Lin Li había utilizado era un golpe de cascada de nivel dos.
Un golpe de cascada de nivel dos no era intimidante en absoluto; lo que era intimidante era la forma en que Lin Li lo había usado.
No hubo ningún gesto redundante ni sonido alguno.
Tan solo fue un leve levantamiento de la mano que desató el Golpe de Cascada. ¡Había sidoun estallidogenuino de poderinstantáneo!
Incluso un aprendiz de mago sabía que no era la fuerza mental o el maná lo que limitaba la capacidad de lucha de un mago: era el tiempo su tiempo de preparación. Los gestos complejos de manos y los hechizos largosmantenían al mago caminando sobre una cuerda floja durante una batalla. La mayoría de los magos del mundo estudiaban la misma cuestión: cómo desatar la magia de forma más rápida.
En cuanto a la interpretación de rápido, sin duda sería lade arrebato instantáneo.
Pero era demasiado difícil.
El control absoluto de la fuerza mental, la asignación precisa del maná y el desglose completo de las estructuras elementales que requería…
Había ido más allá del alcance del conocimiento y la tecnología, y estaba en otro nivel totalmente.
Quizás algunos magos por encima del nivel diez podrían desatar dos hechizos de nivel uno y uno de nivel dos a la vez con décadas de experiencia acumulada, pero para muchos magos, el arrebato instantáneo no era más que un sueño lejano.
Todos habían presenciado hoy cómo se desataba un hechizo de nivel dos de forma instantánea.
Además, el que había usado este hechizo de nivel dos era un mago joven que no tenía más de veinte años.
Todo esto superaba su imaginación.
—Demonio, demonio...—Un mago de barba gris que estaba entre la multitud le miraba con una expresión vidriosa.
Sus palabras fueron una representación completa del pensamiento de la multitud. Aparte de demonio, nadie encontraba otra palabra para describir al joven mago.
Por un momento, la sala estuvo alarmantemente tranquila. Excepto por los sonidos de la una respiración rápida, solo se escuchaban los pasos ligerosde Lin Li desde los escalones.
Lin Li mantuvo una sonrisa en su rostro. Incluso saludó cortésmente a Cromwell mientras se acercaba.
—Ha sido mucho tiempo sin verte, mago Cromwell.
—Mucho... mucho tiempo sin verte...—Cromwell retrocedió inconscientemente. Debido a su nariz rota, había un leve gangueo en su voz rota.
Lin Li había matado a un Guiverno justo delante de sus ojos cuando estaban en las Montañas del Ocaso.
Pero Cromwell siempre había pensado que este mago de los bajos fondos nunca fue un rival.
Fue solo cuestión de suerte que se las arreglara para matar al Guiverno con ese disparo de carámbano, perforando la herida del Guiverno. Si no hubiera sido por eso, el Guiverno lo hubiera hecho pedazos.