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2.11% Gourmet de otro mundo / Chapter 25: Capítulo 25: ¿Por qué no hay vino cuando hay lías de pescado?

章 25: Capítulo 25: ¿Por qué no hay vino cuando hay lías de pescado?

編集者: Nyoi-Bo Studio

Los tres bárbaros de Ouyang estaban listos para la batalla, reunieron toda la energía verdadera dentro de sus cuerpos y enfrentaron a la marioneta; Whitey seguía detrás de Bu Fang.

—Hermano mayor, esta marioneta es muy fuerte. ¡Fuimos lanzados antes de que nos diésemos cuenta! —Ouyang Di miró alarmado a Whitey. Él sintió que la marioneta era muy poderosa.

—¿Cómo una marioneta tiene esa capacidad? ¿Era posible que haya sido creado por un experto de la secta? ¿Pero cómo era posible, si estas habían sido destruidas fácilmente por sus tropas? —pensó Ouyang Zhen.

Bu Fang inexpresivamente miró a las tres bestias humanoides. No estaba interesado en lo que pensaran, así que simplemente dijo: —Los dejaré ir esta vez por ser los hermanos de la mocosa. Sin embargo, no habrá otra oportunidad.

—¡Hermano mayor! ¡¿Acaso este gigoló nos está amenazando?! —preguntó Ouyang Di, incrédulo.

Dentro de la ciudad imperial, nadie se atrevía a amenazar los tres bárbaros de Ouyang. Puede que no fueran playboys, pero eran más que aterradores. A donde fuera que iban, el silencio los seguía. Nadie quería atraer su atención.

Sin embargo, en ese momento, se encontraban con un gigoló imprudente que se atrevió a amenazarlos ¿Eran los tres bárbaros de Ouyang el tipo de personas que podrían ser amenazadas?

—¡La dignidad de los tres barbaros de Ouyang no va a ser violada! —dijo Ouyang Zhen ferozmente mientras lo miraba enojado.

La esquina de la boca de Ouyang Di se enrosco. —¡Ese es nuestro hermano! ¡Nuestro hermano quien nos guió en la dominación dentro de la ciudad imperial! ¡No vamos a ceder!

Sin embargo, las siguientes palabras de Ouyang Zhen casi hicieron vomitar sangre a Ouyan Di.

Ouyang Zhen miró a Whitey detrás de Bu Fang y dijo: —Joven, hablemos de esto. Si nos entregas a nuestra hermanita, podemos olvidar toda esta situación.

Bu Fang inexpresivamente respondió: —Tendrán que preguntarle a su hermana. Ella no pagó después de comer, así que para saldar su deuda tiene que trabajar por una semana y apenas es el primer día.

—¡¿Qué?! ¿Nuestra hermana no pagó por la comida? —los tres bárbaros de Ouyang estaban impactados, con sus bocas abiertas por la sorpresa.

Ouyang Wu replicó: —Entonces definitivamente es porque tu comida sabe mal. De lo contrario, ¿por qué no pagaría nuestra hermana? A pesar de ingobernable y feroz, sigue siendo razonable.

Sus palabras al instante hicieron que Bu Fang frunciera el ceño. Como cocinero, odiaba cuando otros criticaban el sabor de su comida, porque para él era el mayor de los insultos.

—Misión secundaria iniciada: conquistar los paladares de los tres bárbaros de Ouyang. Su arrogancia ha ofendido el inmenso orgullo del anfitrión. Por favor, utiliza tus invencibles habilidades culinarias para abofetearles por completo la cara. El sistema siempre será tu respaldo más fuerte. Misión recompensa: técnica de vinificación.

La arrogante y seria voz del sistema resonó en la mente de Bu Fang sobresaltándolo. No esperaba que una misión secundaria empezara así, especialmente cuando involucraba una recompensa.

—Hey, ninguno de los tres ha probado mi comida, ¿cómo pueden decir que mi comida sabe mal? —preguntó Bu Fang, severa y seriamente, por el bien de la misión.

Los tres bárbaros de Ouyang se miraron entre sí, luego Ouyang Zhen sonrió y dijo: —¿Qué pasa si decimos que tu comida sabe mal? ¿Qué vas hacer al respecto?

La expresión de Bu Fang se volvió fría; estaba molesto.

El gran perro negro que estaba acostado en la entrada levantó su cabeza observando a Bu Fang. Luego se volvió hacia los tres bárbaros de Ouyang y parecía que se acomodaba. Después se volvió a acostar.

—¿No están buscando a su hermana? Bien, les daré una oportunidad. Hagamos una apuesta. Vengan a mi local y prueben mis platillos. Si realmente saben mal, pueden llevarse a su hermana. Si saben bien, entonces se irán a casa desnudos —dijo fríamente Bu Fang.

—¿Una apuesta? ¿Acaso este gigoló es idiota? Si ni siquiera puede dominar a nuestra hermana, ¿qué va a hacer con nosotros tres que tenemos papilas gustativas insulsas?

—¡Muy bien! ¡Aceptamos, pero tienes que mantener tu palabra! Después de todo, a los gigolós les gusta darle la espalda a sus promesas —dijo Ouyang Zhen.

—Entren y ordenen primero —dijo Bu Fang indiferentemente.

Los tres bárbaros de Ouyang se miraron, luego miraron fijamente a Whitey antes de entrar al local. Una vez adentro, los tres empezaron a estudiar los alrededores.

—Aunque el ambiente no es malo, ¿no es demasiado pequeño? —se quejó Ouyang Di mientras movía su cuerpo.

Para sus gigantescos cuerpos meterse en el local era más incómodo que para el Gordo Jin y sus amigos, pero era tolerable.

—Propietario, ¿tienes algún vino? Danos un vaso primero —gritó Ouyang Wu mientras golpeaba la mesa. Este tipo ya se había convertido completamente en un cliente.

—Lo lamento, pero no servimos vino —dijo inexpresivamente Bu Fang.

—¿Cómo un restaurante no tiene vino? ¡Estas bromeando! Olvídalo, veré que tienes aquí—Ouyang Wu miró con desprecio a Bu Fang, luego se volvió hacia el menú en la pared.

Por un momento parecía que el tiempo se había detenido, y el local se volvió extremadamente silencioso.

—¿Las lías de pescado cuestan veinte cristales? ¿La sopa de cabeza de pescado con tofu son veinte cristales también? ¿Un tazón de arroz frito con huevo puede venderse por diez cristales? —Ouyang Zhen era un grosero, pero no un idiota. El precio era un poco aterrador.

—Un plato de vegetales salteados y un tazón de fideos secos mezclados cuestan cien monedas de oro…—Ouyang Wu quedó atónito.

—Ahora sé por qué nuestra hermanita no podía pagar la cuenta, ¡este local es una estafa! —Ouyang Di rugió aireadamente mientras golpeaba la mesa.

Bu Fang frunció el ceño y dijo: —¿Van a ordenar? Tú hermana está dentro de este local. Si ganan la apuesta, dejaré que se la lleven de vuelta.

—¡Hmph! Por el bien de nuestra hermana, ¡lo haré aunque sea una estafa! ¡Tendré las lías de pescado! —declaró Ouyang Zhen.

—Propietario, ¿por qué no vendes vino cuando tienes granos de destilería? —preguntó Ouyang Wu infelizmente con los ojos abiertos.

Bu Fang replicó inexpresivamente: —Los granos de destilería son para preparar las lías de pescado, no para preparar vino.

Ouyang Wu estaba ligeramente confundido: —¿Cuál es la diferencia? Puedes preparar vino mientras tengas granos de destilería, ¿verdad? Entonces dame las lías de pescado también —dijo Ouyang Wu.

—A nuestro local solo le queda una lías de pescado, por favor pide otro plato —dijo simplemente Bu Fang.

—¡Ah! Si no fuera por nuestra hermana, ¡aplastaría tu local en este instante! —Ouyang Wu estaba irritado. Al final ordenó el arroz frito con huevo.

Ouyang Di no dijo nada y solo ordenó la sopa de cabeza de pescado con tofu.

Después de que los tres terminaran de ordenar, Bu Fang asintió y dijo: —Por favor, esperen.

Luego, Bu Fang entró a la cocina y empezó a cocinar.

...

Zhao Ruge estaba sentado en su silla de sándalo mientras escuchaba el reporte de su subordinado. Luego con una leve sonrisa en su rostro, dijo: —¿Estás diciendo que los tres bárbaros de Ouyang han entrado al local? Parece que el local no estaba lejos de ser destruido. A pesar de que los tres bárbaros son unos idiotas sin cerebro, sus niveles de cultivación son altos. Derribar un pequeño local no debería ser un problema. Llama a los demás, vamos a ver un buen espectáculo —Zhao Ruge abrió su abanico de papel y sonrió con elegancia mientras salía de la mansión con sus sirvientes.

Sun Qixiang ya había recibido el reporte de sus sirvientes. Sus ojos del tamaño de un sésamo se entrecerraron mientras sonreía fríamente. —¿Cómo se atreve a sabotear mi comida con chile e incluso hacer que me desnude en público? Me gustaría ver cómo vas a dirigir tu negocio después de contrariar a los tres bárbaros de Ouyang.

Excepto por Zhao Ruge y Sun Qixiang, el resto de las personas que recibieron las noticias apresuradamente se dirigieron al pequeño local con expresiones sombrías. Todos sabían sobre lo terribles que eran los tres bárbaros de Ouyang. Xiao Yanyu estaba ligeramente perturbada. Ella no pensó que el viejo general Ouyang iba a enviarlos directamente a ellos. Si algo pasara en el Pequeño Local de Fang Fang, entonces sería su culpa.

En ese momento, muchas personas se apresuraron al Pequeño Local de Fang Fang.

Todos asumieron que el Pequeño Local de Fang Fang iba a ser destruido por los tres bárbaros de Ouyang.


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