—Rápido, ¡huyan!
—¿Cómo es que este humano es tan poderoso?
Los reyes monstruosos estaban aterrorizados y consumidos por la desesperación. Del grupo, solo su jefe, el Rey Oso Pelajedorado, pudo soportar los ataques de Ji Ning. Los otros solo pudieron ganar un poco de tiempo, pero los terroríficos ataques de Ning de las Rastrilladoras de Cielo y los salvajes ataques de combate cercano les quitarían la vida si cometían el más mínimo de los errores.
Swooosh. Una ráfaga de luz sangrienta atravesó los cielos cuando el monstruo Odiorrojo huyó rápidamente.
—Hora de irse.
Surgió un vendaval, pero en el cielo aparecieron seis rayas distorsionadas que rodearon el vendaval y mataron a tres de los reyes monstruosos que habían estado a punto de huir.
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