1863
—Qin Zhaozhao, no te dije que... no se permiten las emociones personales en la mesa... —obviamente, Huo Mian estaba enojada.
—¡No soporto a esa manipuladora! Solo está usando al apuesto Su... —Pudín lucía furiosa.
—Es asunto de Su Yu. No tiene nada que ver contigo... Eres muy pequeña y quién eres tú para opinar al respecto... Lo que es más, ¿cómo puedes perder los estribos de esa forma en casa?
Por más de que Huo Mian amara a sus hijas, nunca las malcriaba en exceso y tampoco las mimaba. El día anterior en la mansión familiar Su, Pudin y Frijolito casi llevan a Huo Mian al límite de su paciencia al atacarlos a Su Yu y a Jian Tong. Sin embargo, la noche anterior solo había tratado de educarlas en lugar de regañarlas frente a todos. Sin embargo, para su sorpresa, cuando salió la noticia Pudin estaba tan indignada que arrojó su celular al suelo. Eso había enfurecido por completo a Huo Mian.