La jefa Cao no pensó que Huo Mian, que siempre había parecido ser una persona con buena predisposición, fuera tan audaz y temeraria y diera en todos los puntos críticos con sus palabras.
En realidad, el director Wu no estaba a cargo de ascender a las enfermeras, pero si alguien le informaba ese incidente, se volvería algo difícil de manejar. Después de todo, la jefa Cao sí había aceptado algunos sobornos.
—Ejem... Oh, jefa Huo, ¿por qué no se sienta? Lo solucionaremos, no hay que apresurarse.
—No, todos estamos ocupados. Estoy aquí para llegar al fondo de esto, si no obtengo una respuesta satisfactoria, le preguntaré yo misma al director Wu.
Luego de hablar, Huo Mian se puso de pie para marcharse, lo que asustó a la jefa Cao e hizo que se pusiera de pie inmediatamente...
—Jefa Huo, espere un momento, por favor.
—¿Qué sucede? —preguntó Huo Mian, a pesar de que sabía la respuesta.