—Uh... Querido, ¿acaso he oído mal? —Huo Mian dejó de sentirse cansada en un instante. Se volteó y abrazó a Qin Chu.Apoyó su rostro en su pecho firme.
—No.
—¿Estás seguro de que no sentirás celos?
—Por supuesto —los bordes de los labios de Qin Chu se elevaron en una sonrisa.
—Pero, ¿por qué pensaste en eso de repente? —Huo Mian pensaba que Qin Chu y Su Yu eran claros rivales. Ya fuera en el trabajo o en los sentimientos personales, nunca serían amigos. ¿Realmente no le molestaría que Su Yu fuera a la fiesta?
—Has invitado a tantas personas, como Gao Ran y Zhu Lingling, nuestros mejores amigos. Pero Wei Liao y Jiang Xiaowei son amigos de Su Yu, ¿por qué no invitarlo también?
—Pero... ¿Estarás bien con eso? —Huo Mian continuaba algo preocupada.
Después de todo, Su Yu nunca había ocultado sus sentimientos y Qin Chu lo había sabido desde el principio.¿Realmente era buena idea invitar a su rival amoroso?