Huo Mian mordió sus labios y sonrió, incómoda. No reconoció la situación, pero tampoco la negó.
—¿Eso significa que eres la hermana de Huo Siqian? Oh dios, ¡tienes tanta suerte! ¿Tienes su número de teléfono? ¿Su ID de WeChat? ¡Dámelo! —gritaban las enfermeras, emocionadas, rodeando a Huo Mian.
Huo Mian no sabía qué decir.
—Lo siento, yo no hablo con él.
—Huo Mian, si verdaderamente eres miembro de la familia Huo ¿qué haces aquí siendo enfermera? ¡Deberías ser una chica de alta sociedad como Huo Yanyan!
A las mujeres siempre le gustaba chismosear, pero Huo Mian no quería responder ninguna de sus preguntas.
—¿No tienen trabajo que hacer ustedes? —preguntó la Enfermera Jefe Song Lin.
—Enfermera Jefe.
Las otras enfermeras se apartaron ya que la temían.
—Regresen todas a sus estaciones, están trabajando ahora.
Song Lin usó su autoridad para dispersar la multitud inmediatamente.