Parte 1 — Toppe y la mejor amiga.
Hola, soy Toppe, quizás sepan acerca de mí gracias a mi mejor amiga, Danna.
Ella recientemente conoció a una chica de la cual se hizo su amiga, Saya. Al parecer se encontró con ella por primera vez el día de la ceremonia de inicio de clases.
A decir verdad, no entiendo por qué doy este tipo de rodeos. Realmente no me interesa esta chica, Saya, a pesar de que Danna dijo que podría presentármela para que nos conozcamos.
A mí en realidad me gusta Danna.
Ella tiene una mala opinión de mí, ya que desde que entré a preparatoria conseguí muchas novias.
Al principio, Danna se oponía a que yo buscase una pareja, y eso en realidad me hizo feliz.
Antes de que eso, desde la escuela secundaria, estaba enamorado de Danna. Que ella dijera eso en tono celoso me hizo brincar de alegría.
Cuando le pregunté la razón en broma, ella respondió:
"Hemos sido amigos desde la escuela secundaria, no me gustaría que otra chica apareciera de repente y te alejara de mi lado".
Mi corazón latió como loco al escuchar su respuesta, especialmente al escuchar sus palabras mientras miraba su precioso rostro ovalado y esos ojos cafés profundos.
Estos días Danna me ha estado insistiendo en que conozca a Saya. Según ella es una chica muy divertida, pero yo solamente quiero a Danna.
No puedo evitar sentir que lo que hace Danna solo puede alejarnos más, así que he evitado seguirle el consejo. Pero eso le parece hacer sentir mal de alguna forma.
Mi molestia ante esta extraña situación se hizo cada vez más grande y un deseo de hablar con Danna y decirle la verdad detrás de mí actitud empezó a aflorar en mi pecho.
Así fue como un día volvimos a casa juntos y decidí que tocaría el tema de una vez por todas.
Nuestros pasos estaban en perfecta sintonía gracias a años de caminar juntos. Y la diferencia de nuestras alturas me parecía graciosa.
Su perfil giró hacia mí y se encontró con mi mirada. No pude evitar pensar que ella era linda.
"¿Sabes, Toppe? Cuando conocí a Saya, estaba llorando porque había estropeado su sándwich, estaba en cuclillas viendo al suelo".
Últimamente Danna solo habla de Saya, no me molesta particularmente, pero hoy decidí dejarla hablar, también.
"Ella dice que su sueño es ser chef, pero eso yo ya lo sabía, se le notaba en la cara. 'Me encanta cocinar', decía".
Danna rió por lo bajo.
"A ella realmente le encantan los sándwiches, prepara muchos y de diferentes sabores…", pero, de repente, la voz de Danna se perdió en un abrupto silencio.
"Es una chica sándwich".
Lo dije con un tono irritado, pero esa no era mi intención. Se sentía como una burla o algo así en lugar de un comentario para evitar el silencio incómodo.
"Toppe, sé que tú conoces a muchas chicas, pero eso solo me aleja de ti...".
Su voz se escuchaba triste. Mis dientes se apretaron con fuerza.
Quería decirle la verdad.
Respiré profundamente y con dificultad. Pero-
"Por eso, pensé que si te acercabas a Saya, podríamos pasar más tiempo juntos, ¿sabes?"
Las palabras de Danna me hicieron retroceder. Sin embargo, eso solo fue por un momento.
No iba a rendirme de decirle todo ahora.
"Danna". La interrumpí, "En realidad... todas esas chicas con las que salí... mi único propósito era hacerte sentir celosa...".
Danna me miró, llena de sorpresa y nerviosismo.
"¿Qué planeabas hacer si yo empezara a salir con Saya de repente? Tendrías que darnos espacio y no solo me perderías a mí, tu mejor amigo, también a Saya".
"P-Pero... ¡Eso fue lo único que se me ocurrió! Además, Saya es una chica muy linda y responsable, aunque torpe, pero no me molestaría que sea tu novia...".
Claramente podría escuchar una pizca de arrepentimiento en sus palabras.
No, Saya no me interesa para nada, y te aseguro que no lo haría ni aunque la conociera.
¡Porque!
"¡A mí me gustas tú, Danna! No digas cosas como esas. Es ridículo".
"Toppe... tú...".
Los ojos de Danna se llenaron de lágrimas.
"¿Por qué...? ¿Has ocultado esto durante tanto tiempo?".
A pesar de su tono, en realidad, Danna tenía una sonrisa en su rostro.
"Tú también me gustas, tonto".
Y sin esperar a que dijese algo más, la abracé.
No pude contenerme y transmití toda mi pasión con el agarre suave y gentil de mis brazos.