De camino al Gremio de Aventureros, Lux preguntó a Heidi más acerca de su Tío Caballero, que parecía haberle tomado cariño.
—El Tío Caballero es una buena persona. Por eso me ayuda a recolectar hierbas —dijo Heidi con una sonrisa—. Habla pocas veces, pero cuando lo hace, siempre me dice que debo escuchar a mi Mamá y no aventurarme muy adentro del bosque.
—Lo encuentro todos los días en las afueras y buscamos hierbas juntos. Aunque de vez en cuando había algunos monstruos, el Tío Caballero se asegura de protegerme cada vez —finalizó.
Lux sostuvo la canasta de Heidi en su mano y escuchó su historia.
Según ella, la primera vez que conoció a su Tío Caballero fue cuando su madre fue al pueblo a comprar algo de comida.
Heidi estaba jugando fuera de casa cuando el Caballero Carmesí apareció y dejó una mochila de viajero justo en frente de su puerta.
Las niñas pequeñas estaban llenas de curiosidad, así que en lugar de huir, se acercó al Caballero y comenzó a hacerle preguntas.