—¿Tienes ropa de repuesto contigo? —preguntó Lux a Henrietta después de revisar a la hermosa joven, que estaba durmiendo con respiraciones regulares.
—Sí —respondió Henrietta.
Ella entendió lo que Lux quería decir, así que sacó un vestido sencillo de su anillo de almacenamiento y se acercó a Cai.
Entonces, el Semielfo dejó la cueva para permitir a Henrietta cuidar de la Alta Sacerdotisa de la Tribu Rowan, mientras él hablaba con Xander sobre los eventos que habían ocurrido mientras él estaba de guardia fuera de la cueva.
—Ya veo —comentó Xander después de que Lux terminara su explicación, pero su expresión no cambió incluso después de saber que una de las Bases Yelan había caído.
El Semielfo podía decir que Xander daba más importancia al bienestar de Cai que al resultado de la guerra. No encontraba fallas en esto porque sabía cuán leal era el joven a su Suma Sacerdotisa.
Simplemente se sentó a su lado para organizar sus propios pensamientos.