—¿Quiénes sois vosotros y qué hacéis dentro de mi cabaña? —gritó el Medio Orco mientras amenazaba con blandir su espada hacia los Enanos, quienes habían tomado una postura defensiva contra él.
—Venimos en paz —Lux se adelantó y se situó entre los Enanos y el Medio Orco con las manos levantadas en señal de rendición.
—¿Paz? —el Medio Orco resopló—. ¿Venís y robáis de mi casa y decís que venís en paz? Dadme una buena razón por la que no debería mataros aquí y ahora mismo.
Lux frunció el ceño porque según los datos que le proporcionaba el Compendio Elíseo, el Medio Orco frente a él era un Monstruo Alfa de Rango 4.
Al principio, Lux no quería creerlo, pero después de revisar la información por segunda vez, se dio cuenta de que era correcta.
El Semielfo podía sentir gotas de sudor formándose en su frente porque sabía que si realmente ofendían a este Medio Orco frente a ellos, todos se convertirían en queso rebanado en cuestión de segundos.