Sophie fue marginada en la Academia Cawden y maltratada en la casa de sus familiares, y aunque Leland ya los había castigado por sus pecados, eso no eliminaba exactamente esos años de sufrimiento.
Aprendió a crecer muy rápido.
Entre estas emociones siempre cambiantes y cada vez más profundas que Sophie guardaba en su corazón y mantenía en secreto de los demás... había en realidad una cosa que mantenía en el fondo de su corazón.
Leland, quien había estado distraído por las emociones superficiales que continuaban apareciendo en su corazón y mente, no parecía haberse dado cuenta de los sentimientos lentamente desarrollados pero crecientes que simplemente se mantenían por debajo.
En los meses pasados que había estado aquí con él, Sophie tuvo la oportunidad de conocer poco a poco al Duque Romanov. Ahora, lo conocía más allá de simples rumores y chismes que la gente del pueblo comentaba.