Bab 214: CAPÍTULO 214- Diego vs Rem.
Humanos contra demonios.
CAPÍTULO 214
Nirfa fue secuestrada. "¿Por quién?" Se preguntaron todos. Era bien sabido que el refugio de los Elfos era muy, pero muy seguro. Tanto, que Daniel dejó a Nirfa en ese lugar. Incluso Rei y el mismo Dios le dijeron que no se preocupara, los demonios no podrían encontrar ese lugar. Pero se equivocaron.
—¿Secuestrada? ¿Los demonios estuvieron aquí?- Dijo Dix preocupada y un poco asustada.
Si ellos encontraron el refugio de los Elfos, solo podría significar que se han vuelto más peligrosos de lo que ya eran. Sandro estaba consciente de eso, por eso estaba sudando frío. Imaginar que podría haber más demonios como Sufuco, provoca que el miedo invada su cuerpo.
Ya perdió a muchos amigos en su primer enfrentamiento contra Sufuco. Si vuelven a enfrentarse a él, sabe perfectamente que su hermana podría morir. No quiere eso, pero tampoco quiere rendirse. Si se rinde, morirá y su hermana también. Él está casi igualado con Daniel. Si se rinde y escapa con su hermana, solo estaría condenando al mundo a la destrucción.
Decidió seguir adelante por el bien del mundo y de su hermana.
—No me rendiré.- Pensó Sandro, mientras usaba su magia de velocidad para pensar rápido.
Mientras él pensaba, la anciana seguía hablando.
—Sí, ellos…
—Nirfa…
Daniel interrumpió a la anciana con sus palabras. Él estaba hablando dormido.
Ella bajó la mirada para mirarlo. Él estaba llorando mientras dormía. Cuando está despierto, puede fingir que está bien y que puede seguir adelante, pero cuando duerme, pierde el control de sus emociones y deja de fingir. Desde que su abuela murió, Daniel no ha sido el mismo de siempre. El antiguo Daniel murió junto con su abuela.
—Daniel oculta sus sentimientos.- Dijo la Elfa con una mirada triste.
—Es cierto… Daniel no parecía tan furioso o triste… Ocultaba lo que sentía.- Dijo Seiya.
—Pobre… Puedo sentir su tristeza… Ha sufrido mucho… Demasiado… Pobre chico. Es tan joven, pero ni siquiera una anciana con más de 900 años como yo ha sufrido tanto.
—Daniel sufre, pero sigue adelante. Es lo que debemos hacer. No podemos perder la esperanza. Mientras sigamos vivos, seguiremos teniendo oportunidades de derrotar a los demonios.- Dijo Sandro, mientras le acaricia la cabeza a su hermana.
Sandro carga a Daniel en sus brazos.
—Daniel no es el único que sufre. Cada uno de nosotros tenemos nuestras propias razones para estar aquí. El dolor que sentimos debemos usarlo como impulso para mejorar. Si dejamos que el dolor nos detenga, todos nuestros esfuerzos serán en vano. Sigamos el ejemplo de Daniel y sigamos adelante.
—Abue... Abuela...- Dijo Daniel.
Sandro cerró los ojos y tomó aire.
—Los Elfos. Ustedes vendrán con nosotros. Estarán a salvo con nosotros.- Dijo Sandro sonriendo.
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Lejos de ahí, mientras Sandro hablaba con los Elfos, algo peligroso estaba a punto de ocurrir.
Diego está dormido, pero ahora está vestido de nuevo. Tiene una camisa roja y un pantalón negro. Ropa demasiado básica, pues Dax le prohibió sobresalir. Él quería usar ropa muy llamativa, como alguna armadura o trajes de aventureros ajustados, para fingir ser el protagonista de un anime, pero Dax se lo prohibió, para evitar llamar la atención y para que los demonios no puedan encontrarlo tan fácilmente.
Dax está cuidándolo... No lo parece, pero ella quiere mucho a Diego. Lo considera como un hermano. No tiene otros sentimientos hacia él, pues está programada para no enamorarse ni sentir amor por alguna persona.
Diego tiene su cabeza sobre el regazo de Dax.
—Ya no tengo magia… Si más demonios aparecen, Diego morirá… Y Cristhela sabe que no debe regresar… Yo te protegeré, Diego… Aunque eso está prohibido.
—Si está prohibido, no lo hagas.
Diego abre los ojos y sonríe.
—Ya me siento mejor, no te preocupes… Bueno, aunque todo el cuerpo me duele… Aún no me acostumbro a tu fuego.
Ella siente un escalofrío.
Dax levanta la mirada… Su mirada es seria… Y está preocupada.
—Diego, ¿puedes moverte?
—Sí… Creo que sí.
—Un demonio se acerca, y es demasiado poderoso.
—¿Un demonio?
Alguien aterriza fuertemente en el suelo.
Aterrizó algo lejos de Diego, pero incluso estando lejos, su presencia hizo temblar inconcientemente a Diego.
Él se levanta lentamente del suelo, pues la reconoció cuando la vio.
—Rem…
El demonio que aterrizó, es Rem.
Cambió bastante… Tiene los ojos rojos y el cabello blanco, con mechones rojos.
Un verdadero demonio. La adorable Rem ya no existe más.
—Devuélveme al niño.
—Tarapo… Diego, ten cuidado.
Rem se acerca a ellos.
—¿En dónde está el niño?
—Dax…
Dax vuelve a su forma como espada y Diego la toma con su mano derecha.
—Bueno, no sé lo que pasa, pero te voy a derrotar.
—¿Esas serán tus últimas palabras?
—Es cierto… Espera, dame unos segundos…
Rem se detiene y Diego se acaricia la mejilla.
—Necesito decir algo épico y genial… ¡Ya sé!
Toma un poco de aire y sonríe.
—¡Daniel nunca te amó y nunca te amará! ¡Solo tuvo sexo contigo porque es un pervertido! Nunca fuiste importante en su equipo. Solo fuiste un personaje de relleno… Es todo. Ya puedes matarme, linda.
Eso hizo enojar bastante a Rem. Rem, aunque ahora sea un demonio, su alma sigue amando a Daniel. Escuchar que Daniel nunca la amó, solo la enfurece.
Comienza a flotar, mientras sus ojos se vuelven completamente negros.
—¿Te crees gracioso, idiota?
—Sí, un poco.- Dijo con un tono de burla.
—Patético.
—Sí, claro, yo soy… ¡¿Daniel?!
Sus ojos se abrieron por completo y sonrió alegremente.
Extiende sus brazos, como si estuviera saludando a alguien.
—¡¡Daniel, aquí estoy, ayúdame!!
—¡¿Daniel?!
Rem voltea y Diego escapa de ella corriendo. Cayó en su trampa.
—Jeje, se la creyó. Dax, ¿aún no tienes algo de magia?
—He conseguido un poco, pero muy poco.
—Está bien… Creo que me las arreglaré con mis ojos… No uses magia.
Diego voltea a ver a Rem, que lo está persiguiendo… Está volando a una gran velocidad, pero Diego es igual de rápido que ella.
Lamentablemente, Diego sigue débil, no podrá seguir corriendo por mucho tiempo. La única razón por la que no se ha desmayado del dolor y cansancio, es porque está acostumbrado a sentir eso. Desde que Dax lo entrena, el cuerpo de Diego se ha vuelto mucho mejor que el cuerpo de Daniel. Dax lo obliga a entrenar hasta que sufre infartos a causa del agotamiento y dolor. Y cuando Diego no puede seguir por su propia cuenta, ella toma el control del cuerpo de Diego y lo obliga a seguir entrenando.
Gracias a ese entrenamiento infernal, Diego es capaz de superar el límite de su cuerpo y seguir adelante por más tiempo.
Rei entrenó a Daniel para mejorar su poder mágico y físico, pero Diego no tiene magia, es por eso que Dax se enfocó en mejorar el cuerpo de Diego. Si Diego y Daniel se enfrentan en una pelea cuerpo a cuerpo sin magia, Diego resultaría ganador.
—Ya me cansé… Aún sigo débil… Pero debo pelear.
Se detiene y se pone en guardia.
—No moriré, estoy seguro… Bueno, estoy 25% seguro.
Diego observa como Rem es rodeada por fuego azul y viento… Esa extraña combinación comienza a crecer.
—Eso es… ¡increíble!
Un enorme gigante hecho de fuego y viento está frente a él. Mide aproximadamente 30 metros, y Rem está en el pecho del gigante, desde esa posición lo controla.
—Es enorme… pero no tanto… Genial. ¡Es como los famosos golems o gigantes! ¡¡Genial!!
Rem intenta atacarlo usando el puño derecho del gigante.
Él recibe el golpe y sale volando.
—¡Diego, ¿estás bien?!
—Dax… No pude esquivarlo… Me sigue doliendo el cuerpo… Correr fue una mala idea.
Diego se levanta lentamente del suelo y Rem se acerca a él.
—Última oportunidad. ¿En dónde está el niño?
—Tal vez esté en… Pero también podría estar… Pero si contamos esa vez que… Pero también la vez cuando… Y también contar esa ocasión… No, no lo sé.
—No das risa.
—Lo sé. Solo lo dije para molestar.- Dijo Diego sonriendo.
—Idiota.
Rem intenta golpearlo, pero una enorme barrera de hielo aparece frente a Diego, y lo protege.
—¿Eh? Esta barrera es de…
—Veo que te estás divirtiendo, Diego. ¿Puedo unirme a la diversión?
Nei se acerca a ellos caminando… Está sola.
Sus manos están congeladas y un viento helado sale de su boca.
—Esto es cliché. Cuando un personaje está en problemas, viene otro personaje a salvarlo… Pero no importa. ¡Claro que puedes unirte! Pero no te enamores de mí, ya tengo novia y no me interesa tener las sobras de Daniel.
—¡¿A quién llamas sobras?! Aparte, ¿quién se enamoraría de ti? Das pena ajena y ni siquiera eres guapo como para creerte la gran cosa. Daniel es mucho mejor que tú.
—Estoy de acuerdo con ella. ¿Qué clase de chica se enamoraría de un idiota como tú? Si fueras el único hombre sobre la tierra y yo la única chica, me suicidaría para no verte ni escucharte.- Dijo Rem.
—¡Ahhhhhhhh! ¡Dejen de bajarme la autoestima!
Rem intenta atacar a Nei, pero una barrera de hielo la protege.
Nei intenta atacarla con hielo, pero Rem destruye el hielo usando sus puños.
—El hielo que usa como barrera, es más resistente que el hielo que usa para atacar… Interesante.- Dijo Diego.
Sara se dirige hacia Rem volando… También cambió. Tiene el cabello negro, y los ojos completamente negros.
—Patle...- Dijo Dax.
—Debemos irnos. El plan ya está listo. Olvídate del niño por ahora.
—Tsk. Está bien.
Rem y Sara se van volando juntas a una gran velocidad.
—Diego… Patle y Tarapo… Ellas poseen a esos espíritus.- Dijo Dax.
—Mierda… ¿Por qué?
—No lo sé… Tengo que pensar en una teoría… Vete de aquí.
—Sí.
Nei se acerca a Diego.
—Iré contigo, necesitarás ayuda.
—¿Y tu equipo?
—Están reuniendo guerreros… No nos queda mucho tiempo.
—Sí, es cierto… Vamos.
Status Power Mingguan
-- Peringkat
Power 
-- Power
stone