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0.29% El señor de los misterios / Chapter 3: Capítulo 3 – Melissa

Bab 3: Capítulo 3 – Melissa

Editor: Nyoi-Bo Studio

Después de confirmar su plan, de inmediato sintió que tenía una muleta mental. Su miedo y malestar fueron barridos a un rincón de su mente.

Sólo entonces tuvo el ánimo de estudiar con detenimiento los fragmentos de memoria de Klein.

Eventualmente se puso de pie antes de apagar la válvula de la tubería. Observó que la lámpara de pared se atenuaba gradualmente hasta que su llama se apagó antes de volver a sentarse. Mientras que, inconsciente, jugueteaba con el cilindro de latón del revólver, presionó un lado de su cabeza. Lentamente revisó sus recuerdos en la teñida oscuridad carmesí como si fuera el espectador más atento en un cine.

Tal vez, como resultado de que una bala atravesase su cabeza, los recuerdos de Klein eran como cristales rotos. No solo no eran continuos, había muchos puntos que claramente faltaban. Por ejemplo, los recuerdos relacionados a como terminó el exquisito revólver en su posesión, si se suicidó o si fue asesinado, así como el significado de las palabras 'Todos morirán, incluyéndome' en el cuaderno, o si participó o no en algo extraño dos días antes del incidente.

No solo se habían fragmentado esos recuerdos en particular, también faltaban piezas. Era lo mismo incluso para el conocimiento que debía saber. A la luz de la situación actual, creía que, si Klein fuese a regresar a la universidad, era poco probable que pudiese graduarse. Eso era a pesar de que había dejado el campus hace unos días sin descuidarse un poco.

«Necesitas participar en la entrevista del Departamento de Historia de la Universidad de Tingen dentro de dos días... los graduados universitarios del Reino de Loen no tienen la tradición de quedarse en su alma mater.»

Su mentor le había dado una carta de recomendación para la Universidad de Tingen y la Universidad de Backlund.

...

A través de la ventana, Zhou Mingrui observó en silencio la puesta de la luna roja en el oeste. El descenso gradual de la luna continuó hasta que una débil luz brilló desde el este, tiñendo el horizonte de dorado.

En ese momento, hubo una conmoción dentro del apartamento. Pronto, el sonido de pasos se acercó a su puerta.

—Melissa está despierta... realmente es tan puntual como siempre —sonrió. Debido a los recuerdos de Klein, ver a Melissa lo hacía sentir como si realmente fuese su hermana menor.

«Sin embargo, yo no tengo una hermana menor...»

Inmediatamente se contradijo a sí mismo.

Melissa era diferente de Benson y Klein. Su educación rudimentaria no se completó en las clases de la escuela dominical ofrecidas por la Iglesia de la Diosa de la Nocheterna. Cuando llegó a la edad escolar, el Reino de Loen había promulgado la "Ley de educación básica." Se estableció un Comité de Educación Primaria y Secundaria y se le proporcionó financiación especial, lo que aumentó la inversión del reino en educación.

En menos de tres años, bajo la premisa de que se incorporarían numerosas escuelas eclesiásticas, se establecieron muchas escuelas primarias públicas para mantener estrictamente el principio de neutralidad religiosa. Eso era para evitar que la educación se involucrase en los conflictos entre el Señor de las Tormentas, la Diosa de la Nocheterna y el Dios de la Maquinaria y el Vapor.

En comparación con la escuela dominical que solo cuesta un centavo de cobre a la semana, el costo de una escuela primaria pública de tres peniques a la semana parecía bastante caro. Sin embargo, la primera solo proporcionaba educación todos los domingos, mientras que la segunda proporcionaba seis días de clases por semana. En conclusión, el precio era tan bajo que era casi gratuito.

Melissa era diferente de la mayoría de las chicas. Desde temprana edad, disfrutó de cosas como engranajes, resortes y rodamientos. Su ambición era ser mecánica de vapor.

Tras sufrir una falta de cultura, Benson, que conocía la importancia de la educación, apoyó los sueños de su hermana, al igual que la forma en que apoyó la educación universitaria de Klein. Después de todo, la Escuela Técnica de Tingen solo se consideraba educación secundaria. No era necesario que ella asistiera a una escuela de idiomas o una escuela pública para obtener más conocimientos.

En julio del año pasado, Melissa, de 15 años, aprobó sus exámenes de ingreso y cumplió sus sueños de convertirse en una estudiante del departamento de Maquinaria y Vapor de la Escuela Técnica de Tingen. Como tal, sus cuotas escolares semanales aumentaron a nueve peniques.

Mientras tanto, la compañía de Benson se vio afectada por la situación en el Continente Sur. Hubo una caída drástica tanto en las ganancias como en las transacciones comerciales. Más de un tercio de los empleados fueron despedidos. Para mantener su trabajo y su sustento, Benson solo podía aceptar tareas más arduas. Tuvo que trabajar horas extras con mayor frecuencia o ir a lugares con entornos extremos. Eso era con lo que estaba ocupado los últimos días.

No era que Klein no pensase en ayudar a compartir la carga de su hermano mayor, sino que, al nacer plebeyo y haber sido admitido en una escuela de idiomas promedio, sintió una fuerte sensación de insuficiencia cuando se matriculó en la universidad. Por ejemplo, como origen de todos los idiomas en el Continente Norte, el antiguo Idioma de Feysac, era algo que todos los hijos de nobles y de la clase adinerada aprenderían desde una edad temprana. En contraste, él solo tuvo su primer contacto con ese idioma en la universidad.

Se enfrentó a muchos aspectos similares durante su carrera escolar. Klein lo dio casi todo; a menudo se quedaba despierto hasta altas horas de la noche y se levantaba temprano, antes de apenas alcanzar el nivel de los demás. Eventualmente, eso le permitió graduarse con resultados promedio.

Los recuerdos sobre su hermano mayor y su hermana menor permanecieron activos en la mente de Zhou Mingrui hasta que giró la manija de la puerta. Solo entonces reaccionó de golpe y recordó que tenía un revólver en la mano.

"¡Este es un artículo semi-regulado!»

"¡Asusta a niños!»

«Además, ¡todavía está la herida en mi cabeza!»

Con Melissa llegando en cualquier momento, se presionó su sien y rápidamente abrió un cajón de la mesa y tiró el revólver de golpe.

—¿Qué sucede?

Melissa miró con curiosidad cuando oyó la conmoción.

Ella todavía estaba en el apogeo de su juventud. A pesar de no tener muchos alimentos nutritivos para comer, causando que su rostro se viese delgado y ligeramente pálido, su piel permanecía brillante; emanando las vibras de una chica joven.

Cuando Zhou Mingrui vio los ojos marrones de su hermana revisándolo, se forzó a sí mismo a calmarse y tomó un objeto al lado de su mano antes de cerrar con calma el cajón para ocultar la existencia del revólver. Colocó la otra mano en su sien, ¡La textura le confirmaba que su herida ya había sanado!

Sacó un reloj de bolsillo plateado y presionó la parte superior con suavidad, haciendo que la tapa se abriese.

Una foto del padre de los hermanos. Era el artículo más valioso que el sargento del Ejército Real dejó atrás, pero al ser un artículo de segunda mano, de vez en cuando en los últimos años, a menudo funcionaría mal, a pesar de haber hecho que un relojero lo arreglase. Había avergonzado a Benson, quien disfrutaba llevarlo con él para elevar su estatus muchas veces, por lo que al final fue botado de vuelta a casa.

Había que decir que, tal vez, Melissa sí tenía talento para maquinaria. Después de comprender los principios detrás del reloj, tomó prestadas las herramientas de su Escuela Técnica para jugar con el reloj de bolsillo. Recientemente, ¡incluso afirmó haberlo arreglado!

Él miró la tapa abierta del reloj y vio que la segunda manija no se movía. Subconscientemente, giró el dial superior para dar cuerda al reloj de bolsillo.

Sin embargo, a pesar de enrollarlo unas cuantas veces, no escuchó el sonido de resortes tensos. La segunda manija permaneció inmóvil.

—Parece que está roto de nuevo —miró a su hermana mientras trataba de encontrar un tema de conversación.

Melissa le lanzó una mirada inexpresiva y caminó rápidamente para quitarle el reloj de bolsillo.

Se paró en su lugar y levantó el botón que estaba encima del reloj. Con unos pocos giros simples, sonó el tictac de la segunda manija.

"¿Jalar el botón hacia arriba no es para ajustar el tiempo?»

La expresión de Zhou Mingrui palideció de inmediato.

En ese momento, una campana sonó desde una catedral lejana. Campaneó seis veces, sonando distante y etérea.

Melissa inclinó la cabeza para escucharla y volvió a apretar el botón. Después de eso, lo giró para sincronizar la hora.

—Ahora está bien —dijo con simpleza, sin emoción. Luego presionó el botón de regreso hacia abajo y se lo devolvió a Zhou Mingrui.

Él respondió avergonzado con una sonrisa cortés.

Melissa le dirigió a su hermano mayor una mirada penetrante antes de girarse para caminar hacia el armario. Tomó sus artículos de tocador y una toalla antes de abrir la puerta para irse. Se dirigía al baño público.

"¿Por qué su expresión daba una sensación de desprecio y resignación?»

"¿Es una mirada de amor y preocupación por un hermano retrasado?»

Zhou Mingrui bajó la cabeza y se echó a reír. Cerró la tapa del reloj de bolsillo con un *clic* antes de volver a abrirla.

Repitió esta acción mientras sus pensamientos ociosos se centraban en una pregunta.

«Klein se suicidó sin un silenciador. Bueno, lo consideraré como un suicidio por ahora. Su suicidio debería haber causado una gran conmoción; sin embargo, Melissa, que estaba a solo un muro de distancia, no lo notó en absoluto.»

"¿Estaba durmiendo muy profundamente? ¿O es que para empezar el suicidio de Klein está envuelto en misterio?»

*¡Clic!*

El reloj de bolsillo se abrió.

*¡Clack!*

El reloj de bolsillo se cerró...

Melissa volvió de lavarse y vio el subconsciente acto de su hermano de abrir y cerrar constantemente el reloj de bolsillo.

Su mirada se tornó vidriosa una vez más debido a la exasperación y dijo con voz dulce: —Klein, saca todo el pan restante. Recuerda comprar unos frescos hoy. También hay carne y guisantes. Pronto es tu entrevista. Te haré cordero con guisantes.

Mientras hablaba, sacó una estufa de un rincón. Con un poco de carbón, hirvió una olla de agua caliente.

Antes de hervir el agua, abrió el cajón más bajo del armario y sacó lo que parecía un tesoro: una lata de hojas de té inferiores. Tiró unas diez hojas en la olla y fingió que era té de verdad.

Melissa sirvió dos grandes tazas de té mientras compartía dos trozos de pan de centeno con Zhou Mingrui.

«No hay aserrín o exceso de gluten mezclado, pero es poco apetecible.»

Él todavía se sentía débil y estaba hambriento. Se obligó a tragar el pan con el té mientras se quejaba por dentro.

Melissa terminó de comer unos minutos después. Luego de ajustar su pelo negro que se extendía hasta su chaleco, lo miró y dijo: —Recuerda comprar pan fresco. Todo lo que necesitamos son ocho libras. El clima es caluroso, por lo que el pan se echará a perder fácilmente. Además, compra el cordero y los guisantes. ¡Acuérdate de comprarlos!

«Ciertamente, estaba mostrando preocupación por su hermano tonto. Incluso tuvo que repetir para enfatizarlo otra vez.»

Él asintió con una sonrisa.

—Muy bien.

Con respecto a la libra del Reino de Loen, Zhou Mingrui emparejó la memoria muscular de Klein con la suya. Creía que se aproximaba al medio kilogramo de lo que estaba acostumbrado.

Melissa no dijo nada más. Se levantó y ordenó el área. Después de guardar el último trozo de pan para el almuerzo, se puso un velo andrajoso que su madre dejó, recogió una bolsa tejida a mano para llevar sus libros y papeles y se preparó para irse.

No era domingo, así que tenía un día entero de clases a las cuales asistir.

Caminar desde su apartamento hasta la Escuela Técnica de Tingen tomaba unos cincuenta minutos. Había carruajes de caballos públicos que costaban un centavo por kilómetro, con un límite de cuatro peniques en la ciudad y seis peniques en las afueras. Para ahorrar dinero, Melissa se iba antes de tiempo y caminaba a la escuela.

Momentos después de que abrió la puerta principal, detuvo sus pasos y giró su cuerpo hasta la mitad, diciendo: —Klein, no compres demasiado cordero o guisantes. Benson podría volver el domingo. Ah, y recuerda que solo necesitamos ocho libras de pan.

—Muy bien. Seguro —respondió con exasperación.

Simultáneamente, repitió la palabra "domingo" varias veces en su cabeza.

En el Continente Norte, un año se dividía de manera similar en doce meses. En cada año, había 365 o 366 días. Una semana se dividía de manera similar en siete días.

La división de los meses era el resultado de observaciones astronómicas. Eso hizo que sospechase si estaba en un mundo paralelo. En cuanto a la división de los días, era resultado de la religión. Eso se debía a que el Continente Norte tenía siete dioses ortodoxos: el Eterno Sol Ardiente, el Señor de las Tormentas, el Dios del Conocimiento y la Sabiduría, la Diosa de la Nocheterna, la Madre Tierra, el Dios del Combate y el Dios de la Maquinaria y el Vapor.

Viendo a su hermana cerrar la puerta y marcharse, de repente suspiró. Pronto, sus pensamientos se centraron en el ritual para mejorar la suerte.

«Lo siento, realmente deseo volver a casa…»


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