En realidad, Fu Jiu no sabía qué tipo de oportunidades recibiría si recibía la mayor cantidad de invitaciones.
Siempre había pensado en mantener el disfraz, terminar la misión de fotografía y tener cuidado con el Todopoderoso. ¿Así que cómo podría haberle puesto atención a tal chisme?
Cuando Wu Zhen hizo esta petición, ella no le contestó de inmediato, sino que espero a escuchar el resto de la oración.
La razón era muy simple, a ella no le gustaba la actitud de Wu Zhen.
Wu Zhen nunca esperó que alguien le contestara de esa forma. Al principio sonrió levemente y luego dijo: —¿Tiene alguna consulta, señorita?
Al mirarla, Fu Jiu se apoyó contra una plataforma de vidrio, levantó una copa de vino tinto y dijo lánguidamente: —Nop.
Wu Zhen entrecerró sus ojos, de repente se dio cuenta que la mujer frente a sus ojos probablemente no era una pusilánime.