—Sí, señor.
Ese fue el "sí" más difícil que el administrador del lobby había tenido que decir.
A pesar de estar anonadado por dentro, era bueno leyendo a las personas. Cuando volvió a levantar la cabeza, estaba lleno de sonrisas.
—Joven Señor Fu, ¿que más le gustaría? Haré que se lo sirvan.
—¿Joven Señor Fu?
Fu Jiu se detuvo, y su voz hizo una pausa.
—En verdad no me gusta ese nombre, es fácil que se confunda con otros. ¿No hay algún otro Joven Señor Fu que venga seguido por acá?
El administrador del lobby quería decir que no había manera de confundirlos.
El otro era un estudiante extremadamente educado con las mejores calificaciones, cualquiera podría ver la diferencia.
Pero ya que el CEO estaba aquí, no podía decir eso, así que solo podía explicar a regañadientes.
—¿Que, que…?
—Llámeme Lord Jiu.