Punto de vista en tercera persona [porque los lectores no querían el punto de vista de Isabela]
—Les dije que me dejaran ahora mismo —gritó mientras los caballeros la escoltaban para salir. Alzó la mano y abofeteó a uno de ellos. El hombre apretó los dientes, pero lo soportó.
Los miró a ambos con enojo y luego entró en el carruaje. Sus ojos estaban rojos, ardiendo de ira. Quería que el mundo entero sufriera.
—¿Por qué siempre tenía que sufrir ella sola? Sostenía el vestido con fuerza en sus manos mientras las palabras de Casio rondaban en su mente. No era la primera vez que ese hombre la insultaba, pero esta vez había cruzado todos sus límites. Pero ¿cómo supo de Philip y ella? ¡Si solo fue entre las cuatro paredes de su palacio! Ni siquiera le había escrito una carta.
Frunció el ceño ante ese pensamiento.
—¡No! ¡Tenía que encontrar a Philip de alguna manera y ver qué pasaba! Pero después de lo de la última vez, ¿podía ir al palacio de Essendson?