—Toc, toc...
—¡Adelante!
Amanda, cargando un montón de documentos, entró en la oficina de Jessica Flack.
Mientras revisaba los archivos, Jessica dijo —¿Finalmente decidiste aparecer?
En el momento en que Amanda escuchó esto, supo que Jessica la había confundido con Basil Jaak. Rápidamente aclaró —¡Señor Flack, soy yo!
Jessica miró hacia arriba a Amanda, soltó un desganado 'uh' y luego preguntó casualmente —¿El Asistente Jaak no ha llegado?
Amanda negó con la cabeza y respondió —El Asistente Jaak aún no está aquí.
—Entonces intenta localizarlo y dile que se apresure a la empresa. Si no, despídelo sin indemnización —dijo Jessica con indiferencia. Internamente, sin embargo, estaba hirviendo de ira.
Amanda dio una sonrisa irónica —Señor Flack, llevo media hora intentando contactar al Asistente Jaak, pero su celular está apagado.
—Oh —Jessica tarareó extrañamente, indicándole a Amanda que regresara a su trabajo con un gesto de la mano y un asentimiento.