Como si a Gabriel realmente no le importara presentar la Prueba de Corona, sin importarle en absoluto su Talento. Y no estaba del todo equivocado.
Incluso si Gabriel se sometiera a la Prueba de Corona, su talento no se podría ver afectado ya que le fue otorgado por el Grimorio. Ningún Numen podría compararse con un Grimorio que hubiera surgido por un dios verdadero y no por Semidioses.
Un Numen no podía afectar los Grimorios de esa manera. De igual forma, tampoco podían interferir con el Talento y la Fuerza del Alma que proveía el Grimorio.
Sin mencionar el controlar su alma para que él dijera la verdad, los Númenes ni siquiera podían tocar su alma que ya estaba protegida por el Grimorio.
Esta fue una de las lecciones que Lira le enseñó cuando habló de cómo el Grimorio impulsaba su talento y fortalecía su alma. Esa también era la razón por la que Gabriel realmente no tenía miedo de pasar por la Corona de Elisus. Incluso si la pasaba, él sabía que saldría ileso.