Fu Hee parecía sorprendida cuando preguntó:
—¿Vas a entrar a FJ? ¿Tu hermano lo aprobó?
—¡No necesito su ayuda! Puedo entrar por mí misma. Acabo de descubrir que las cosas son mucho más fáciles cuando las hago yo misma —dijo FangSu con una sonrisa confiada.
Fu Hee le lanzó una mirada extraña antes de alejarse.
FangSu pensó que su madre probablemente estaba demasiado sorprendida de que ella fuera capaz de entrar a FJ por sí misma y una sonrisa de autosuficiencia apareció en su rostro.
A la mañana siguiente, después del desayuno, Jia Li llevó a Jazmín al taller para acompañar a Fu Hua mientras trabajaba en el vestido que ella había diseñado.
Jia Li estaba sorprendida de que, con su apretada agenda, todavía pudiera trabajar en el vestido.
—No tienes permiso para hablar mucho, solo Jazmín —advirtió Fu Hua mientras estrechaba la mirada hacia ella.
—¿No crees que eso es injusto? —preguntó Jia Li frunciendo el ceño.