—Pero... —preguntó el Rey Jian, ya sabiendo que Neveah tenía más que decir.
—Pero yo... Xenon... Le he hecho un gran mal a Xenon. Y no sé cómo enfrentarme a eso... enfrentarlo a él —murmuró Neveah en un tono pesado.
El Rey Jian estuvo callado por un rato, y Neveah se estremeció visiblemente. Sabía que la situación era complicada para ella, pero no era diferente para el Rey Jian tampoco.
Xenon era su hermano y ella, su verdadera destinada a quien él tenía un legítimo reclamo.
—¿Enfrentarlo a él? ¿O enfrentar los sentimientos que tienes por él? —preguntó el Rey Jian en un tono profundo.
—Yo... —comenzó Neveah pero no tenía las palabras adecuadas, no creía que hubiese palabras adecuadas para esto.
Hacerle daño al Rey Jian era lo último que Neveah quería hacer, pero negar a Xenon era algo que simplemente no podía hacer.