Cuando Ethan vislumbró a sus hijos a quienes no había podido ver durante los últimos tres meses, más ira alimentó su pecho mientras dirigía su mirada para fulminar a Viper con la vista.
—Lamento lo que hice, pero espero que puedas perdonarme algún día —suplicó.
Ethan miró a Viper, tanto con confusión como con ira, sin comprender del todo lo que este último estaba balbuceando.
No pasó mucho tiempo antes de que llegaran los oficiales de policía a la escena, Viper no se resistió como suponían que lo haría y siguió a los policías sin ofrecer resistencia. Más temprano que tarde, Viper fue arrestado y llevado a la comisaría.
Nadie se molestó en seguirlos. Erika acababa de llegar y luego irían a la comisaría.
Ethan hizo entrar a Erika en la casa antes de cargar a Luca en sus brazos.