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Por otro lado, Qiao Nian acababa de colgar su teléfono y sacó una silla, preparándose para encender su computadora, cuando Nie Mi la llamó.
Sus cejas estaban fruncidas mientras contestaba la llamada irritada. Acababa de terminar su ducha y su voz era baja. —Hola.
—Nian Nian, ¿estás ocupada?
La voz de Nie Mi se escuchó a través del teléfono.
Qiao Nian miró su computadora, que acababa de encender. Puso su mano en su frente y caminó hacia el lado para contestar su llamada. —No. ¿Qué sucede?
Nie Mi no le gustaba dar rodeos. Dijo directamente, —Quiero decirte acerca del concierto.
Qiao Nian no estaba interesada. Sin embargo, por cortesía, controló su temperamento y dijo, —Oh, cuéntame.
Nie Mi inmediatamente comenzó a promocionar el gran evento que se iba a celebrar en Ciudad de Rao.